La búsqueda de mantener una buena salud y bienestar a medida que se envejece se ha convertido en una prioridad para muchas personas. Sin embargo, un término que ha cobrado relevancia en los últimos años es el ‘inflammaging’, un concepto que se refiere al proceso de inflamación crónica de bajo grado que acompaña al envejecimiento. Este fenómeno no solo impacta en la apariencia física, sino que también puede ser responsable de diversas enfermedades, desde trastornos cardiovasculares hasta enfermedades neurodegenerativas. Comprender cómo se manifiesta el ‘inflammaging’ y cómo combatirlo se vuelve esencial, especialmente al acercarse la época estival, cuando la salud y el bienestar son aún más decisivos.
En la actualidad, el manejo del ‘inflammaging’ es clave para preservar no solo la salud física, sino también el estado emocional y mental. Adotar hábitos saludables que fomenten una respuesta inflamatoria equilibrada puede tener un efecto positivo a corto y largo plazo. Desde la dieta hasta la actividad física, los cambios en el estilo de vida pueden marcar una gran diferencia en cómo el cuerpo afronta este proceso natural del envejecimiento. En este sentido, conocer los fundamentos del ‘inflammaging’ y aprender a combatir sus efectos se convierte en un paso hacia un verano más saludable y revitalizador.
1EL ORIGEN DEL ‘INFLAMMAGING’
El término ‘inflammaging’ combina «inflamación» y «envejecimiento» para describir un fenómeno biológico que ha sido objeto de numerosas investigaciones en el ámbito de la medicina y la biología del envejecimiento. Esta inflamación crónica de bajo grado se relaciona con el daño celular producido por diversas circunstancias, como la acumulación de radicales libres, la descomposición de células senescentes y un estilo de vida poco saludable. A medida que las personas envejecen, el sistema inmunitario experimenta cambios que pueden resultar en una respuesta inflamatoria desproporcionada.
La activación continua de las células del sistema inmunológico puede llevar a un estado de inflamación constante que, aunque no sea evidente de inmediato, impacta en la salud general del individuo. Este proceso se ha vinculado no solo al envejecimiento sino también a la aparición y progresión de enfermedades crónicas, lo que destaca la importancia de entender y gestionar el ‘inflammaging’ como parte integral del proceso de envejecimiento. La inflamación crónica está asociada con condiciones como la diabetes tipo 2, la hipertensión y la artritis, lo que subraya la necesidad de prestar atención a este fenómeno.
El conocimiento de cómo se origina el ‘inflammaging’ permite adoptar medidas proactivas. Comprender que factores como la dieta, el estrés y la falta de actividad física influyen en la inflamación ofrece una perspectiva valiosa para prevenir o mitigar sus efectos. La combinación de cambios ambientales, dieta y estilo de vida puede ser clave para manejar el ‘inflammaging’ en la vida cotidiana.