Cada vez son más los usuarios afectados por estafas en aplicaciones de compraventa de productos como Wallapop. La regulación de Hacienda sobre este tipo de plataformas está causando ciertos estragos en los vendedores que hacían negocio con ellas, estando alerta la administración sobre aquellos individuos que reciban ingresos acumulados de más de 2.000 euros o realicen más de 30 operaciones relacionada con artículos de segunda mano.
Sin embargo, no son los vendedores los más perjudicados por las recientes políticas y por el proceso que aplican multitud de vendedores en particular. En las últimas semanas, se han reportado numerosos casos de personas estafadas a través de vendedores de Wallapop, siendo sucesos realmente acusados los relacionados con productos de coleccionismo o videojuegos.
El abogado Miguel Ángel Mejías ya advertía de situaciones en las que el comprador (o a veces un sujeto que le suplantaba al robarle la cuenta) solicitaba una transferencia bancaria previa y nunca enviaba el producto, y la Guardia Civil ha hablado de esta situación también en sus comunicaciones sociales. Pero el método más utilizado es el que te explicamos a continuación.
Usuarios de Wallapop denuncian estafas por la regulación de Hacienda
En el diario QUÉ! hemos consultado casos concretos, como el ocurrido a finales de febrero con el especialista en compras baratas Ragnachollos, que fue víctima de una estafa concreta: acordó una supuesta consola Super Nintendo y le llegó otro modelo, además de sucio y roto.
«Lo siento, no», le escribía el estafador negándose a hacer envíos por Wallapop. «Con el tema de Hacienda solo hago envíos certificados. De hecho sale más barato que con Wallapop por el tema del seguro. Como puedes ver llevo años vendiendo y comprando en Wallapop», especificaba en sus explicaciones. La trampa está en las 900 valoraciones positivas que tiene el vendedor, que en realidad son de una cuenta comprada.
Sobre este asunto, hemos hablado con el desarrollador de producto Felipe Báguena, gran conocedor de este tipo de situaciones y una de las personas que más ha denunciado estos intentos en las últimas semanas. Felipe nos cuenta que las estafas más típicas son las que se hacen a los compradores: «Te vendo un artículo, te digo que está en un estado y realmente está en otro», explica. «Puede ser una falsificación general, de una de las partes, o en el caso de los videojuegos de colección, la caja, el manual…».
«Si haces esto a través de Wallapop es inviable, porque reclamas y casi siempre se ponen de parte del comprador», asegura. «La forma que tienen de saltarse el control de Wallapop es asegurar que por la regulación de Hacienda ya no llevan a cabo ventas por la aplicación, solo por fuera, y para generar confianza enseñan sus votos positivos antes de solicitar pagos por Bizum o Paypal».
Felipe nos cuenta que las estafas están realmente bien enmascaradas, hasta el punto de que no te puedes fiar de los votos ni de la antigüedad, sino que tienes que proceder a rastrear bien el bagaje de la cuenta y, aun así, te la juegas si decides comprar por fuera de la aplicación. Los estafadores llevan a cabo decenas de estafas del mismo producto: ponen artículos que valen cientos de euros a mitad de precio y luego no envían lo acordado, consiguiendo un buen pellizco igualmente pese a la rebaja por el mero hecho de tratarse de artículos de colección de alta valoración.
FACUA denunció a Wallapop por perjuicios al vendedor
Luego está la fórmula contraria: el comprador que estafa al vendedor. Se dan casos de usuarios que compran un producto tecnológico valioso y, cuando lo reciben, llevan a cabo una reclamación asegurando que el aparato en cuestión no funciona. A la hora de devolver el producto al vendedor, devuelven el mismo modelo pero estropeado y se quedan el original que funciona a la perfección, teniendo así la coartada perfecta para que Wallapop les devuelva el dinero y el poseedor original se quede sin el ingreso y sin el artículo de valor que estaba comercializando.
Como apunte curioso, hace unos años, las organizaciones FACUA y Consumidores en Acción llevaron a cabo la presentación de una denuncia contra Wallapop ante las autoridades de consumo de varias comunidades autónomas por algo relacionado con esto último. En este caso, los vendedores estaban siendo perjudicados porque la plataforma no entregaba el dinero que retenía de los compradores.
También hay casos en los que el comprador estafa al vendedor reclamando a Wallapop y devolviendo un producto que no es el original
Se realizaron varias quejas de usuarios que vendían y que, una vez el comprador aceptaba la operación y pagaba el producto, el dinero se quedaba en el limbo y no llegaba a su destinatario. Wallapop ofrece un plazo de 48 horas para que se compruebe que el artículo está en un estado correcto y, de ser así, se procede a efectuar el pago al vendedor en la cuenta bancaria designada, recibiéndolo también en un periodo de dos días. Sin embargo, esto no ocurría en varios casos, y los usuarios no recibían ninguna explicación al respecto a través del apartado de contacto de Wallapop.
FACUA denunciaba a Wallapop conforme al Real Decreto 1/2007, que establecía en la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios en su artículo 65 que «los contratos con los consumidores y usuarios se integrarán, en beneficio del consumidor, conforme al principio de buena fe objetiva, también en los supuestos de omisión de información precontractual relevante». Este Real Decreto considera también una infracción el uso de prácticas comerciales desleales con los consumidores y usuarios.
Asimismo, se amparaba en el artículo 1258 del Código Civil, mencionando que «los contratos se perfeccionan por el mero consentimiento, y desde entonces obligan, no solo al cumplimiento de lo expresamente pactado, sino también a todas las consecuencias que, según su naturaleza, sean conformes a la buena fe, al uso y a la ley».
Instrucciones de Wallapop para detectar casos de estafas
Como en Wallapop no son ajenos a la situación, la plataforma tiene en su sección de ayuda un apartado específico para las estafas. En él se explica cómo una persona puede identificar un comportamiento sospechoso,

Allí se mencionan intentos de estafa concretos como que te pidan el número de teléfono o el correo electrónico para una primera opción de contacto, que te mande enlaces para finalizar una transacción o precisamente lo que hemos venido tratando hoy: que te diga que realiza envíos o pagos por fuera de Wallapop. De todos modos, insisten en cosas tan lógicas como el mero hecho de desconfiar de ofertas demasiado buenas para ser verdaderas.