Aunque por momentos parece que los Premios de la Academia de cine norteamericana han perdido influencia, lo cierto es que los números apuntan a que, incluso cuando cuentan con problemas para atrapar y atraer espectadores, los Oscar siguen teniendo un efecto directo en la taquilla. Se hace evidente en los datos de dos de las películas que más dieron de qué hablar en esta ceremonia: ‘Un Completo Desconocido’, el biopic de Bob Dylan protagonizado por Timothée Chalamet, y ‘Anora’ de Sean Baker, la gran ganadora de la noche más importante de Hollywood.
Según los datos semanales de Comscore, la primera de las dos cintas, que acaba de estrenarse en España, es la más vista en el país, superando cómodamente la segunda semana de la más reciente película del universo cinematográfico de Marvel, ‘Capitán América: Un Nuevo Mundo’, con la cinta consiguiendo un empujón ante la posibilidad de que su protagonista se llevara la estatuilla dorada del pasado domingo. A esto se suma que ‘Anora’ está creciendo en taquilla de nuevo: la cinta está teniendo su segunda mejor semana desde su estreno y ha conseguido un nuevo público desde la ceremonia.
Es una nueva señal del cambio de época en la taquilla. Además de que es complicado volver a los datos pre pandémicos, incluso con un buen comienzo de año los datos han vuelto a retroceder detrás de los buenos números de 2019, un 16,6% por debajo de los datos que se tenían en España para la misma fecha, es también evidente que las cintas que están teniendo buenos resultados no son los blockbusters superheroicos de Marvel o DC. Allí están los números de ‘Retadores’ el año pasado y de superproducciones de autor de los últimos tiempos como ambas ‘Dune’ o incluso ‘Oppenheimer’.
Es un dato interesante en cuanto a las próximas inversiones de Hollywood. Dos películas de presupuesto mediano, en el caso de ‘Anora’ unos 6 millones de dólares y entre 50 y 70 millones en el caso de ‘Un Completo Desconocido’, que han sido exitosas y que han conectado con el público alrededor de la temporada de premios son un modelo interesante de cómo puede cambiar la industria, incluso si en el fondo se trata de un modelo tan antiguo como los estudios, dejar de invertir todo en tres grandes películas al año, y en su lugar apostar por más cintas pequeñas que representen un riesgo menor.
LOS OSCAR Y HOLLYWOOD VUELVEN A LOS PEQUEÑOS DRAMAS
Lo cierto es que Hollywood empieza a recuperar este tipo de cintas, y buena parte de este esfuerzo se debe a los resultados del cine de terror en los años de la crisis post pandémica. Ha sido el género más seguro para invertir por sus bajos presupuestos y sus altas posibilidades de retornos, que benefician a los estudios y distribuidoras independientes. A24, productora de ‘Todo a la vez en todas partes’ y ‘The Brutalist’ o Neon, distribuidora de ‘Parásitos’, ‘Anatomía de una Caída’ y casa productora responsable de ‘Anora’, han marcado un camino interesante para los grandes estudios.
De hecho, algunos directores de estos estudios más pequeños han sido reclutados por las grandes casas productoras. Está el caso de Rober Eggers, director de la nueva ‘Nosferatu’ para Universal, quien empezó siendo uno de los directores más confiables de A24 o Dennis Villeneuve, encargado de la saga ‘Dune’ en la gran pantalla y cuya ‘Enemy’ de 2014 es todo un clásico de culto nacido en la misma productora. Mientras tanto, Neon ha sido la casa productora de la mayoría de las producciones hollywoodenses de Pablo Larraín.
LOS OSCAR SUMAN UN MILLÓN DE ESPECTADORES POR STREAMING
Mientras tanto, los premios de la academia, a pesar de sus malos datos iniciales, pueden presumir de su primera prueba con un servicio de streaming, la exclusiva en Estados Unidos Hulu. Este sumó otro millón de espectadores a una ceremonia que, contando los 18 millones de espectadores en su país, superó los datos del año pasado, y que con los números de ‘Anora’ posteriores a su victoria pueden respirar tranquilos sabiendo que se mantiene el interés de los estudios por competir.