El pescado es un alimento fundamental en cualquier dieta equilibrada. Aporta proteínas de alto valor biológico, vitaminas esenciales como la A, D y B12, y minerales como el yodo y el selenio. Sin embargo, no todos los pescados son iguales. Algunos, especialmente los de gran tamaño y predadores, acumulan niveles preocupantes de mercurio, un metal pesado que puede ser tóxico para la salud. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha alertado sobre este riesgo, identificando las especies que deberíamos consumir con moderación.
En un estudio reciente, la OCU analizó más de un centenar de productos pesqueros, tanto frescos como congelados y enlatados, para medir sus niveles de mercurio. Los resultados son claros: mientras que algunos pescados son seguros y beneficiosos, otros, como el pez espada y el atún rojo, presentan concentraciones elevadas de este metal. En este artículo, profundizaremos en las recomendaciones de la OCU y te contaremos cuáles son las alternativas más seguras para mantener una dieta saludable sin riesgos.
5El papel de la OCU en la seguridad alimentaria
La OCU ha desempeñado un papel crucial en la concienciación sobre los riesgos del mercurio en el pescado. A través de estudios rigurosos y campañas informativas, la organización ha logrado alertar a los consumidores sobre la importancia de elegir pescados seguros. Sus recomendaciones están alineadas con las de la AESAN, lo que refuerza su credibilidad y utilidad.
Además, la OCU no se limita a identificar problemas, sino que también ofrece soluciones. En su página web, la organización proporciona guías detalladas sobre cómo seleccionar pescados seguros y cómo incorporarlos a una dieta saludable. Este enfoque integral ha convertido a la OCU en un referente en materia de seguridad alimentaria.