El pescado es un alimento fundamental en cualquier dieta equilibrada. Aporta proteínas de alto valor biológico, vitaminas esenciales como la A, D y B12, y minerales como el yodo y el selenio. Sin embargo, no todos los pescados son iguales. Algunos, especialmente los de gran tamaño y predadores, acumulan niveles preocupantes de mercurio, un metal pesado que puede ser tóxico para la salud. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha alertado sobre este riesgo, identificando las especies que deberíamos consumir con moderación.
En un estudio reciente, la OCU analizó más de un centenar de productos pesqueros, tanto frescos como congelados y enlatados, para medir sus niveles de mercurio. Los resultados son claros: mientras que algunos pescados son seguros y beneficiosos, otros, como el pez espada y el atún rojo, presentan concentraciones elevadas de este metal. En este artículo, profundizaremos en las recomendaciones de la OCU y te contaremos cuáles son las alternativas más seguras para mantener una dieta saludable sin riesgos.
4Consejos para un consumo responsable
La OCU no solo identifica los riesgos, sino que también ofrece recomendaciones prácticas para un consumo responsable de pescado. En primer lugar, sugiere alternar entre especies con alto y bajo contenido de mercurio, evitando el consumo excesivo de las más contaminadas. Además, recomienda prestar atención al origen del pescado, ya que los productos de acuicultura suelen ser más seguros.
Para los grupos de mayor riesgo, como mujeres embarazadas y niños, la OCU aconseja evitar por completo los pescados con altos niveles de mercurio y optar por alternativas como el salmón, la trucha o los moluscos. Estas pautas no solo protegen la salud, sino que también fomentan una alimentación variada y equilibrada.