El Benito Villamarín fue testigo de una noche inolvidable para el Real Betis y, en especial, para Isco Alarcón. El exmadridista se convirtió en el líder de una remontada que dejó al Real Madrid sin respuestas y, lo más importante, sin tres puntos clave en la lucha por LaLiga.
Con una asistencia, un gol de penalti y una actuación magistral, el mediocampista malagueño recordó a todos por qué alguna vez fue considerado una de las grandes joyas del fútbol español.
9La dulce venganza de Isco
Si alguien disfrutó esta noche más que nadie, fue Isco Alarcón. El malagueño, que salió del Real Madrid sin el reconocimiento que merecía, tuvo su gran revancha.
Con una actuación memorable, dejó en claro que aún tiene mucho fútbol en sus botas.
El Villamarín coreó su nombre. Sus compañeros lo abrazaron. La prensa lo elogió. Y el Madrid, su exequipo, sufrió en carne propia la clase magistral de un futbolista que, cuando se siente importante, puede ser determinante.
La historia de Isco con el Madrid terminó hace tiempo, pero esta noche, en Sevilla, escribió un nuevo capítulo. Uno que, sin duda, disfrutó al máximo.