Planear unas vacaciones de ensueño, en una casa paradísiaca, puede salirte como el cuento de la Cenicienta o como una peli de terror, y este pobre turista lo vivió en carne propia en una historia que ha salido a la luz. Pagó 700 euros por una casita con vistas al mar en Italia, toda emocionada por sus días de relax, pero cuando llegó y abrió la puerta… ¡madre mía, qué giro tomó la trama! Esto no fue una comedia romántica, fue un caos total.
Lo que pintaba como un planazo perfecto terminó con ella en la comisaría poniendo cara de “¿qué pasó aquí?”. ¿Quieres saber cómo se dio este desastre? ¡Te lo cuento ya mismo!
2Una casa, una puerta, una familia y un fraude al descubierto
Llegó el gran día, maletas en mano, sonrisa de oreja a oreja, toca el timbre y… ¡sorpresa! La puerta se abre y no sale un casero con las llaves y una sonrisa, sino una familia con cara de “¿y tú quién eres?”. Resulta que la casa estaba ocupada por gente que vivía ahí feliz de la vida y que no tenía ni idea de que su hogar estaba “en alquiler”. ¡Imagínate la escena!
En dos segundos pasó de “¡qué vacaciones tan geniales!” un “me han timado”. La casa existía, sí, pero no estaba para alquilar, y la familia no sabía nada del anuncio ni de su “reserva”. Total, que terminó corriendo a la comisaría a denunciar, con las vacaciones por los suelos y una lección que no olvidará nunca.