Luka Doncic no iba a recibir un contrato supermax en los Mavericks
Las polémicas en torno a Luka Doncic siguen creciendo, especialmente tras las filtraciones desde Dallas que apuntan a preocupaciones sobre su condición física como la razón principal detrás del sorprendente traspaso que llevó al jugador esloveno a los Los Angeles Lakers a cambio de Anthony Davis. Según diversas fuentes, los Mavericks habrían considerado que el estado del base no era el ideal para liderar el equipo a largo plazo, lo que motivó la decisión de intercambiarlo por una estrella consolidada en la pintura como Davis, en un movimiento que ha generado un gran debate entre los aficionados y expertos de la NBA.
En noviembre, Luka Doncic se ausentó durante cinco partidos debido a un supuesto esguince de muñeca, según el informe oficial del equipo. Sin embargo, el New York Times, citando fuentes internas de los Mavericks, reveló que la lesión no era completamente real y que, en realidad, el exjugador del Real Madrid habría estado fuera de las canchas para trabajar en la mejora de su estado físico.
El traspaso de Luka Doncic, pensado por Nico Harrison
Según The Athletic, las dudas de Nico Harrison sobre la condición física de Luka Doncic a largo plazo fueron clave en la decisión de traspasar al jugador esloveno. Durante una rueda de prensa, el gerente general de los Mavericks, reconocido por su enfoque en la preparación física, explicó el movimiento con una reflexión sobre la cultura del equipo: «Hay personas que encajan en la cultura y personas que entran y aportan a la cultura. Esas son dos cosas distintas. Creo que las personas que vienen contribuyen a la cultura». Estas palabras reflejan la visión de Harrison sobre el perfil de los jugadores que considera adecuados para el proyecto de Dallas.
Según C. Clark, M. Vorkunov y F. Katz, Patrick Dumont, gobernador de los Mavericks, reaccionó con una risa cuando Nico Harrison le planteó por primera vez la posibilidad de traspasar a Luka Doncic, una decisión que, aunque sabían que sería impopular, la franquicia finalmente llevó a cabo. Al respecto, Harrison defendió el movimiento afirmando: «Lo más fácil para mí es no hacer nada. Todo el mundo me elogiaría por no hacer nada. Realmente creímos en ello. El tiempo dirá si tengo razón».
Los Mavericks no iban a pagar un contrato supermax
Si Luka Doncic hubiese continuado en los Dallas Mavericks, habría tenido la posibilidad de firmar un contrato máximo de 345 millones de dólares por cinco años, lo que lo habría convertido en uno de los jugadores mejor pagados de la historia de la NBA. Este acuerdo, conocido como «contrato supermax«, está reservado para las estrellas más determinantes de la liga y supone un compromiso financiero de gran envergadura para cualquier franquicia. Considerando el impacto de Doncic en el equipo y su estatus como uno de los talentos más brillantes de la liga, en teoría, este tipo de extensión habría sido una opción lógica para asegurar su continuidad a largo plazo. Sin embargo, la realidad dentro de la organización texana era muy distinta.
Según fuentes cercanas a la competición, los Mavericks nunca tuvieron la intención real de ofrecerle ese contrato supermax al jugador esloveno, lo que habría sido un factor determinante en la decisión de traspasarlo. Aunque Doncic seguía siendo el rostro de la franquicia, existían dudas sobre su estado físico y su capacidad para liderar el proyecto a futuro, lo que llevó a la directiva a tomar medidas antes de verse en una situación contractual complicada. En lugar de arriesgarse a perderlo en el futuro sin una compensación adecuada o verse forzados a ofrecerle un contrato que no estaban dispuestos a asumir, los Mavericks optaron por ejecutar un traspaso estratégico, asegurando la llegada de una estrella como Anthony Davis y redefiniendo el rumbo del equipo.