No es la primera vez que sucede algo similar en Cornellá
Iñaki Williams ha vuelto a alzar la voz contra el racismo en el fútbol en el partido entre el RCD Espanyol y el Athletic Club de Bilbao. En un principio, se pensó que el mayor de los Williams había sido el objetivo de los insultos, recordando el lamentable episodio que vivió en el mismo estadio en 2020. Sin embargo, posteriormente se confirmó que los gritos racistas iban dirigidos a Maroan Sannadi, joven jugador del Athletic.
El incidente ocurrió tras una jugada individual de Sannadi que terminó con el balón fuera del campo. Fue en ese momento cuando se escucharon insultos desde la grada, entre ellos «puto moro». Iñaki Williams, visiblemente molesto, informó al árbitro, quien actuó con firmeza iniciando el protocolo para este tipo de situaciones. Este nuevo episodio ha encendido de nuevo el debate sobre el racismo en el fútbol español, poniendo el foco en la necesidad de medidas más contundentes contra estos comportamientos.
El mensaje de Iñaki Williams a los racistas
Después del encuentro, Iñaki Williams no dudó en pronunciarse sobre lo sucedido y lanzó un mensaje claro contra los responsables de los insultos. «Al fútbol hay que venir a disfrutar. No pueden ocurrir este tipo de cosas. Maroan ha hecho una jugada individual, el balón ha salido fuera y le han gritado ‘puto moro’. No es la primera vez que pasa aquí», declaró con contundencia.
Williams también quiso destacar la correcta actuación del árbitro y el apoyo que recibió su compañero. «El árbitro ha actuado muy bien. Hay que darle visibilidad y que castiguen a los culpables. Eso no debe empañar a la afición del Espanyol. Tienen leyendas de color como N’Kono y al fútbol se tiene que venir a apoyar. Los jugadores del Espanyol necesitan a su afición y no que cuatro empañen el fútbol», añadió el delantero bilbaíno.
El RCD Espanyol condena los insultos racistas
Desde el RCD Espanyol no tardaron en pronunciarse sobre lo ocurrido. A través de sus redes sociales, el club perico condenó los insultos y reafirmó su compromiso con la lucha contra el racismo en el fútbol. Un gesto que, aunque necesario, no ha evitado que el nombre del club vuelva a quedar manchado por un nuevo episodio de intolerancia en sus gradas.
El entrenador del RCD Espanyol, Manolo González, también se mostró tajante en rueda de prensa, asegurando que este tipo de comportamientos no tienen cabida en el deporte. Ahora, queda por ver las medidas que tomará tanto LaLiga como la justicia española contra los responsables de estos insultos.
