Un hallazgo inesperado (cofres antiguos, al mejor estilo de los Piratas del Caribe) que se volvió viral porque ha sorprendido a todos, primero por el hallazgo como tal y luego por la habilidad del joven. Y es que lo que para muchos es simple basura, para otros puede ser una oportunidad de oro. Esto es lo que ha demostrado un joven que encontró dos cofres antiguos en un contenedor y decidió restaurarlos. Su novia, la usuaria de TikTok @alina.sin.ms, compartió la historia en su perfil, donde ya cuenta con más de 18.000 seguidores.
La sorpresa y emoción con la que relata el descubrimiento ha conquistado a miles de personas en redes sociales, quienes han aplaudido la creatividad y habilidad de su pareja y no es para menos, después de haber realizado un trabajo extraordinario y casi partiendo de la nada. Es una costumbre bastante arraigada en los países “desarrollados” encontrarse en los contenedores de basura cualquier cosa, desde televisores antiguos que todavía funcionan, gasta cofres prehistóricos que sólo necesitan un poco de trabajo para quedar como nuevos otra vez.
En el video, Alina muestra cómo su novio llega a casa cargado con los cofres rescatados y emocionado por la restauración. “Unos ven basura y él encuentra tesoros”, dice ella mientras enseña las piezas, que a primera vista parecían desgastadas, pero que esconden un gran potencial.
1El arte de restaurar: de lo viejo a lo hermoso
Y es que el joven restaurador no solo tiene buen ojo para detectar tesoros en la basura, sino que también domina la ebanistería. Seamos honestos, a veces pasamos por el contenedor de basura y vemos muebles y mesas que para muchos se encuentran en buen, que con un poco de trabajo podemos alargar su vida útil, pero simplemente no nos detenemos a mirar, que es lo que ha hecho este joven. El joven ha demostrado que con paciencia y dedicación se pueden lograr grandes cosas, comenzó a trabajar en los cofres, limpiándolos y reparando cada detalle. La madera gastada volvió a la vida, las bisagras recuperaron su brillo y el interior fue renovado con tela, logrando un resultado impresionante.
Uno de los cofres, de mayor tamaño, tenía un soporte interior para colocar un cajón, lo que lo hacía aún más especial. El segundo, más pequeño, sorprendió a la pareja con su forro de tela en el interior, un detalle que agregaba un toque de elegancia inesperado. “¡Qué bonito!”, exclamó Alina al ver el resultado del trabajo de su novio. Bueno por historias como estas merece la pena pagar internet y usar las redes sociales, a que sí.
