Carlo Ancelotti ha dado un giro inesperado al planteamiento del Real Madrid. Lo que en el inicio de temporada parecía una alineación impensable, con Vinicius, Bellingham, Rodrygo y Mbappé juntos en el campo, se ha convertido en la gran apuesta del equipo.
Lo que cambió no fue solo la estrategia del entrenador, sino la mentalidad de la plantilla, impulsada por una charla determinante en el vestuario.
3Una lección aprendida dentro y fuera del campo
La reprimenda no solo impactó a los implicados, sino a toda la plantilla. Rodrygo lo reconoció en rueda de prensa antes del siguiente partido, y Ceballos lo reafirmó tras el duelo contra el City:
«Si todo el equipo corre, todo es más fácil». La reflexión colectiva llevó a una conclusión inapelable: el talento individual no bastaba, hacía falta compromiso y esfuerzo.