Soluciones ante los frecuentes problemas de adenoides de los niños

Las infecciones son habituales entre los menores. Y hasta los 6-7 años aproximadamente también es frecuente que consecuencia de ello, de una infección viral o bacteriana, se inflamen igualmente las adenoides, más conocidas como ‘vegetaciones’. En estos casos sus adenoides crecen más de la cuenta y provocan la patología en el menor, un cuadro conocido como ‘hipertrofia adenoidea’.

“Se trata de un tejido de defensa linfático que se encuentra al final de la nariz y que presenta un papel fundamental en defensa de las infecciones en edad pediátrica”, explica la doctora Irene López, otorrinolaringóloga del Hospital Quirónsalud Valencia, y del Centro Médico Quirónsalud Mercado Colón (Valencia).

Eso sí, este crecimiento más de la cuenta de las adenoides es normal en los menores hasta los 5 años aproximadamente, porque conforme los niños van creciendo estos tejidos disminuyen de tamaño.

LOS PRINCIPALES SÍNTOMAS

“En estos casos tienen lugar síntomas como las roncopatías, incluso con paradas o apneas; así como dificultad respiratoria, catarros nasales con mocos frecuentes, de manera que el pequeño habitualmente respirará por la boca, que tendrá muchas veces abierta”, remarca la especialista de Quirónsalud Valencia.

Es más, la doctora López mantiene que en estos casos de hipertrofia de adenoides puede producirse un desarrollo del macizo facial incorrecto, y con un malposicionamiento dentario; e incluso se pueden ocasionar otitis recurrentes, por dificultad en la ventilación a nivel de las trompas de Eustaquio”, agrega.

UN DIAGNÓSTICO CLÍNICO

Esta otorrinolaringóloga del Hospital Quirónsalud Valencia sostiene que el diagnóstico es fundamentalmente clínico y suelen realizarse varias pruebas para verificarlo, como una rinofibroslaringoscopia o endoscopianasal, una prueba que implica el empleo de un aparato que se introduce a través de la nariz y por el que ver el agrandamiento de las vegetaciones.

En otras ocasiones, y como pruebas complementarias, esta especialista indica que pueden realizarse estudios de la apnea del sueño infantil, o bien radiografías.

EL TRATAMIENTO HABITUAL

Aunque cada caso siempre debe individualizarse, Irene López mantiene que la principal opción para tratar una hipertrofia de las vegetaciones o adenoides es la cirugía de adenoides o adenoidectomía.

Doctora Irene Lopez Delgado
Doctora Irene López Delgado, otorrinolaringóloga del Hospital Quirónsalud Valencia.

En ella señala que se extirpan las mismas y que, durante la edad pediátrica, se realiza bajo anestesia general muy corta, de apenas unos 10-30 minutos de procedimiento quirúrgico. “La intervención se induce por gases para facilitar la experiencia del niño que, una vez dormido, se le hace la intubación, y se le coloca la vía. Se hace la intervención por vía oral, sin cicatrices y a través de la boca. Se hace un legrado o suave raspado del tejido adenoideo con el objetivo de quitar la atrofia. Además del legrado, en niños mayores o adolescentes se emplea la cirugía endoscópica nasosinusal para abordar la cirugía de vegetaciones, combinándola en ocasiones con cirugía de cornetes o tabique y sinusitis si procede”, relata esta otorrinolaringóloga de Quirónsalud Valencia.

Lo habitual, según prosigue, es que se trate de un procedimiento ambulatorio, en el que incluso el menor puede regresar a casa a las horas de la intervención. “La recuperación suele producirse en 3-4 días en los que el niño está haciendo su vida completamente normal”, remarca la doctora Irene López.

“En ocasiones”, añade la especialista, “la cirugía de adenoides se combina con cirugía de amígdalas, drenajes de oído o frenillo lingual para abordar patologías complementarias que suelen estar presentes en estos niños”.

Son extrañas las complicaciones que puedan derivarse de una adenoidectomía o extirpación de las adenoides; siendo las más habituales los mareos, las náuseas, o los vómitos, así como un leve sangrado por la nariz o la boca.

“Siempre que nuestro hijo acostumbre a roncar por las noches, e incluso haga apneas durante el sueño nocturno, o bien tienda siempre a respirar por la boca, aunque no esté con catarro, debe ser valorado por un otorrinolaringólogo”, sostiene esta experta de Quirónsalud Valencia.