Las freidoras de aire han llegado para quedarse. Se han convertido en el electrodoméstico de moda que promete cambiar la forma en que cocinamos, todo sin necesidad de aceite. Sin embargo, como pasa con todo lo que es demasiado bueno para ser cierto, hay algunos detalles que los vendedores prefieren no mencionar. Aunque son una maravilla en muchos aspectos, también tienen sus puntos débiles. ¿Te atreves a descubrir lo que no te cuentan? ¡Sigue leyendo!
3A veces la limpieza de las freidoras de aire no es tan fácil como dicen
Una de las ventajas que más se promocionan de las freidoras de aire es su facilidad de limpieza. Las piezas desmontables y lavables parecen ser la clave para facilitar este proceso. Sin embargo, en la práctica, puede que no sea tan sencillo. Algunas freidoras tienen espacios difíciles de alcanzar o recubrimientos que requieren un poco más de esfuerzo para eliminar restos de grasa. Aunque se supone que se limpia en un abrir y cerrar de ojos, puede que no sea tan rápido como pensabas.
Resumiendo, las freidoras de aire son, sin duda, una opción popular y útil para quienes buscan cocinar de manera más saludable y rápida. Pero no son la solución mágica que muchos te venden. No logran ese crujiente perfecto, no son ideales para grandes cantidades y, a veces, limpiar la máquina puede ser más complicado de lo que parece. Como todo, tienen sus pros y contras, así que antes de lanzarte a comprar una, asegúrate de que realmente se adapta a tus necesidades.
