Meat pie o el clásico pastel de carte de toda la vida vamos, eso es lo que aprenderemos a hacer el día de hoy. Si eres de los que disfruta probando cosas nuevas en la cocina, prepárate para viajar a Australia sin salir de tu cocina con uno de los platos más representativos de ese país. El meat pie, o pastel de carne, es mucho más que un simple plato: es una institución en la cultura australiana.
Este plato es además de un símbolo para los australianos, un plato crujiente por fuera, jugoso por dentro, este pastel es la combinación perfecta de sabores que te hará volver por más. Y lo mejor de todo: no necesitas ser un chef para prepararlo. ¡Vamos a por ello!
3Paso a paso: para un meat pie perfecto
- Prepara la masa: Lo primero que debes haces es hervir el agua con la leche y derrite la mantequilla en la mezcla. Aparte, mezcla la harina con la sal y luego agrega los líquidos. Amasa hasta obtener una textura suave y homogénea. Cubre la masa y refrigera durante una hora.
- Haz el relleno: Sofríe la carne con la mantequilla y resérvala. Luego, saltea el tocino y la cebolla hasta que estén dorados. Añade la carne de nuevo y cocina por 5 minutos más. Desglasa con el vino tinto, mezcla bien y agrega el caldo, la salsa inglesa, el kétchup y la nuez moscada. Cocina a fuego lento, tapado, durante una hora.
- Espesa y sazona: Disuelve el almidón de maíz en agua y agrégalo al relleno para espesar. Añade el perejil, sal y pimienta. Cocina 2 minutos más y deja enfriar completamente.
- Monta los pasteles: Precalienta el horno a 180°C. Extiende la masa hasta que tenga 3 mm de grosor. Corta cuatro círculos de 15 cm para la base y colócalos en moldes engrasados. Rellena con la carne y un poco de salsa. Cubre con círculos de 12 cm para la parte superior, haz una pequeña X en el centro de cada uno y sella los bordes.
- Hora de hornear: Bate la yema con la leche y pincela la parte superior de los pasteles. Hornea durante 40 minutos o hasta que estén dorados.
- A disfrutar: Sirve caliente, acompañado de kétchup y la salsa que reservaste.
Con esta receta, tendrás en tus manos el verdadero sabor de Australia. Fácil, delicioso y perfecto para compartir, ¿qué más puedes pedir? ¡Anímate a prepararlo y sorprende a todos con este clásico que nunca pasa de moda!
