Punter sobresale en la segunda mitad y muestra su habilidad en el tiro
El Barcelona no estaba dispuesto a dejarse sorprender después de dos derrotas consecutivas en Europa y una dolorosa derrota en casa ante el Manresa, que provocó la pañolada en el Palau. Aunque mostró cierta inconsistencia en la primera mitad, impuso su dominio tras el descanso, arrollando al Maccabi con un contundente 100-71, que se convirtió en una víctima fácil para los catalanes.
Una vez más, Kevin Punter se destacó como el verdugo, desatado en la segunda mitad, y terminó el partido con 28 puntos, incluyendo 6 de 11 en triples. Aunque Jabari Parker (14 puntos y 7 rebotes) y Willy Hernangómez (14 puntos y 7 rebotes) tuvieron un gran arranque, fue Punter quien finalmente marcó la diferencia en el encuentro.
Punter apareció en la segunda mitad
Los azulgranas parecieron despertar en defensa en el segundo cuarto, y con un inspirado Brizuela, apoyado por un imparable Parker y Punter, los habituales jugadores clave lograron establecer la máxima ventaja en el minuto 19. Sin embargo, tras relajarse, el Maccabi aprovechó su dominio en el rebote ofensivo y, liderado por Rivero, recortó la diferencia, dejando el marcador en 42-36 al final de la primera mitad, en el minuto 20.
Al comenzar la segunda mitad, Punter desplegó su gran habilidad en el tiro y, con siete puntos consecutivos, elevó la ventaja del Barcelona a su máxima en el minuto 24. El partido luego se descontroló, y en ese caos, el Barça aprovechó la situación con los triples de Abrines, Brizuela y Metu, además de tres tiros libres de Anderson, para encaminar el triunfo. A pesar de los esfuerzos resilientes de Jokubaitis y Rivero, no fue suficiente.
Lluvia de triples
Las dudas del Maccabi se convirtieron rápidamente en un colapso colectivo al inicio del último cuarto. Perdieron el rumbo en ataque, cada vez más presionados por la defensa del Barcelona, y comenzaron a flaquear en su juego defensivo. Esto permitió a los tiradores del Barça aprovechar la oportunidad, con dos triples de Metu, uno de Núñez y otros dos de Punter, quien fue ovacionado por el Palau al ser sustituido, para sellar prácticamente el triunfo. Los jugadores del Maccabi, incapaces de reaccionar, se convirtieron en simples espectadores en los últimos minutos.
A medida que el partido avanzaba, los israelíes fueron completamente superados por el juego del Barça, que siguió sumando con fluidez. El Maccabi, ya sin respuesta, terminó siendo aplastado por un marcador final de 100-71, sin poder frenar la maquinaria ofensiva de los azulgranas, quienes se llevaron una victoria contundente y merecida.