Limpiar la campana de la cocina no suele estar entre nuestras tareas favoritas, ¿verdad? sobre todo cuando pensamos en la grasa de las rejillas. Esa mezcla de grasa pegajosa y suciedad acumulada puede convertirse en todo un dolor de cabeza. Pero ¡que no cunda el pánico! Hay trucos simples, caseros y efectivos que harán que esta tarea deje de ser una pesadilla. ¿Lo mejor? No necesitas gastar ni un euro en productos milagrosos. Aquí te cuento cómo conseguir que las rejillas de tu campana brillen como el primer día.
3Trucos caseros para manchas difíciles
Si la grasa sigue resistiéndose, no te preocupes, porque los remedios caseros siempre vienen al rescate:
- Agua y limón: Hierve agua con zumo de limón y utiliza esta mezcla para limpiar las rejillas. El vapor y el poder desengrasante del limón harán maravillas. Además, si enciendes el extractor mientras limpias, evitarás que el olor del limón te agobie.
- Vinagre blanco: Mezcla vinagre blanco con agua tibia en partes iguales. Esta solución es perfecta para eliminar la grasa más incrustada. Aplícala con una esponja suave, deja actuar unos minutos y luego aclara con agua limpia.
- Esponja adecuada: Asegúrese de usar una esponja o estropajo suave que no dañe el material de las rejillas. La clave está en ser constante y no dejar que la grasa se acumule demasiado tiempo.
Con estos trucos, despedirte de la grasa será mucho más fácil de lo que imaginabas. ¿A qué esperas para probarlos? Tu campana extractora y tus cenas sin humos te lo agradecerán.