Si estás buscando una receta sabrosa, saludable y fácil de preparar, esta lasaña de espinacas y ricotta es la respuesta. Con su mezcla cremosa y su toque de queso parmesano, es el plato perfecto para disfrutar de una comida deliciosa sin complicaciones. ¿Lo mejor de todo? Es un plato lleno de nutrientes, ideal para compartir con la familia o impresionar a tus invitados. ¡Vamos a ponernos manos a la obra!
3Montando la lasaña con espinacas
¡Aquí es donde empieza la diversión! Ahora que tienes la bechamel y el relleno listos, es hora de montar la lasaña. Empieza cubriendo el fondo de la fuente con una capa de bechamel. Luego, coloca una capa de láminas de lasaña y, sobre ellas, una capa del delicioso relleno de espinacas y ricotta. Si te gusta el toque de la nuez moscada, este es el momento de añadirla.
Repite el proceso hasta llenar la fuente, asegurándote de terminar con una capa de bechamel. Espolvorea el queso parmesano y al horno. Cocina durante 30-35 minutos a 200°C, hasta que la superficie esté dorada y burbujeante. Deja reposar unos minutos y ¡listo para disfrutar!
Esta lasaña es un plato completo y reconfortante que puedes disfrutar en cualquier ocasión. Acompáñala con una ensalada fresca y un buen vino, y tendrás una cena perfecta. ¡Buen provecho!
