Adiós a soplar en los controles con los nuevos alcoholímetros de la Guardia Civil

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¿Te imaginas que ya no tengas que soplar en esos controles de alcoholemia que suelen ponernos los pelos de punta? Pues sí, la Guardia Civil ha decidido dar un salto hacia la modernidad con un nuevo alcoholímetro que elimina por completo la necesidad de soplar. Suena bien, ¿verdad? Hoy te contamos cómo funciona esta tecnología, sus ventajas y lo que significa para los controles de tráfico.

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Resultados aproximados y siguientes pasos

Resultados aproximados y siguientes pasos

El alcoholímetro de aproximación no da un resultado exacto, sino aproximado. ¿Qué significa esto? Si la prueba marca un 0,0, pues ya está, el proceso puede terminar ahí. Pero si da positivo, ya entramos en el procedimiento tradicional: el conductor deberá someterse a una prueba con el alcoholímetro clásico o, si es necesario, un análisis de sangre. Y ojo, si el conductor se niega a hacer esa segunda prueba, se notifica a la autoridad judicial. En resumen, es una forma de obtener una primera respuesta rápida sin complicar demasiado la cosa ni para los agentes ni para los conductores.