Imagina entrar a un estudio especializado donde el único servicio que te ofrece es rascarte la espalda. Puede sonar extraño, pero este es el insólito negocio que han creado las Chicas Rascadoras (The Scratcher Girls). Fundado por Toni George, una mujer de 55 años, este peculiar servicio de terapia de relajación se ha convertido en una verdadera tendencia.
Con un precio de hasta 130 dólares por hora, estos terapeutas especializados usan uñas de 7,5 centímetros para brindar a sus clientes una experiencia única que no solo busca aliviar la picazón, sino también liberar tensiones y equilibrar energías.
1De una pasión personal a un negocio lucrativo
La idea detrás de The Scratcher Girls surgió de una experiencia personal de Toni George. Desde niña, disfrutaba profundamente de que le rascaran la espalda, llegando incluso a pagarles a sus hijos y luego a sus nietos para que lo hicieran. La pasión por esta actividad le dio una revelación nocturna: ¿por qué no convertirlo en un servicio profesional? Después de investigar la viabilidad del negocio, George decidió poner en marcha el estudio.
Con un equipo de terapeutas, ahora ofrecen sesiones personalizadas donde rascan no solo espaldas, sino también otras zonas del cuerpo como el cuero cabelludo y las orejas, con movimientos suaves que promueven la liberación de endorfinas, como la serotonina, ayudando a los clientes a relajarse y equilibrar sus energías.