La movilidad en la capital española enfrenta un desafío monumental con el cierre temporal de la Línea 6 del Metro de Madrid, la más frecuentada del sistema, que transporta a una media de 618.000 pasajeros diarios. Este cierre, que se extenderá durante seis meses, responde a una ambiciosa renovación integral con una inversión de 129 millones de euros. Aunque las obras prometen mejoras significativas, los ciudadanos se enfrentan a importantes inconvenientes. Por esta razón, en este artículo te contaremos que planes tienen las autoridades para mitigar los efectos indeseados de este cierre y te explicaremos cuáles serán las modificaciones que mejorará esta línea.
3Proyectos paralelos: modernización integral del Metro de Madrid
El cierre de la Línea 6 forma parte de un plan más amplio que busca revolucionar el transporte público en Madrid. Entre las iniciativas más destacadas figura la construcción del nuevo intercambiador de Conde de Casal, cuyo inicio está previsto para el primer trimestre de 2025. Este espacio permitirá integrar de forma eficiente la Línea 6 del Metro de Madrid, el corredor de la A-3 y diversas líneas de autobuses urbanos e interurbanos.
Por otro lado, se avanzará en la prolongación de las líneas 5 y 11, que reforzarán la conectividad en áreas clave de la ciudad. La Línea 5, por ejemplo, conectará Alameda de Osuna con el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, facilitando el acceso directo a millones de usuarios y trabajadores.
Mientras tanto, la Línea 11 extenderá su recorrido hasta Conde de Casal, consolidándose como una arteria clave en el sistema metropolitano. Estas ampliaciones no solo mejorarán las conexiones existentes, sino que también atenderán el crecimiento demográfico y la demanda creciente de transporte en la región.