Cuando llenamos el depósito de nuestro coche o nos detenemos en una estación de servicio, pocas veces pensamos en los gérmenes y bacterias que acechan en los surtidores de gasolina. Sin embargo, un estudio reciente ha revelado que estos pueden estar hasta 11.000 veces más contaminados que la taza de un retiro. A continuación, te contamos por qué es importante tomar precauciones y qué solución ofrece una innovadora startup española.
1Los surtidores, un foco de contaminación inesperado y que tocas todos los días
Aunque parezca sorprendente, los surtidores de gasolina son uno de los puntos más sucios que tocamos a diario. Según un estudio de Kimberly-Clark, las mangueras de repostaje pueden acumular hasta 11.000 veces más gérmenes que un retiro, debido al contacto frecuente de millas de personas ya la falta de limpieza constante. A lo largo del día, estos dispositivos se tocan sin protección, lo que incrementa el riesgo de transmisión de bacterias y virus. Para evitar contaminarte, es fundamental tener cuidado y lavarse las manos después de cada uso.