Mario Soberón no levanta cabeza
El partido ante el Oviedo evidenció que el Real Zaragoza sigue inmerso en un mar de dudas y acabó perdiendo, a pesar de ponerse con un 2-0 a favor. Pero, además, Mario Soberón, volvió a romperse, lo que hace ver que el equipo de Víctor Fernández está perdiendo el rumbo, más cuando había empezado la liga a un alto nivel.
Esta derrota supone el quinto partido perdido en liga en La Romareda del equipo de Víctor Fernández y su séptima jornada seguida sin ganar. Los asturianos, que remontaron con goles de Ilyas Chaira, por partida doble, y Alemao en una sensacional segunda parte los tantos de Liso y Adu Ares en la primera, enlazan tres victorias consecutivas y se afianzan en ‘playoffs’. Y todo se agrava con Mario Soberón.
La mala situación del Real Zaragoza se agrava con Mario Soberón
Porque el futbolista había regresado en Ipurua tras dos meses fuera de los terrenos de juego por una farragosa lesión fibrilar en la musculatura isquiotibial de la pierna izquierda. Mario Soberón salió en la segunda mitad y jugó algo más de veinte minutos. No tuvo gran incidencia y se le observó corto de ritmo como es natural después de dos meses en la enfermería, pero su regreso no fue nada de lo esperado, porque se volvió a romper.
Es así que ahora el delantero sufre «una lesión muscular a nivel del recto anterior del cuádriceps derecho«. Por tanto, el futbolista dice adiós al 2024 y probablemente no pueda regresar hasta febrero. Una mala noticia en plena crisis de resultados que suma seis jornadas sin ganar y una caída libre que le ha alejado hasta los cuatro puntos de la sexta posición.
La última lesión del delantero lo tendrá de baja, mínimo, hasta febrero
«Es una noticia desafortunadísima, lamentable; Mario Soberón se ha vuelto a romper», ha señalado el entrenador. «Vamos a ver la evolución y la trascendencia, pero va a ser una recuperación larga y es muy mala noticia. El chaval está hundido, hay que afrontarlo con muchísima paciencia y soportarlo de la mejor forma posible» ha explicado.
La realidad es que a Mario Soberón «le ha afectado mucho«. Justo cuando Mario Soberón había visto la luz, tras respetarse todos los plazos de recuperación sin forzar en ningún momento, llega el nuevo golpe. La intención era que jugase en torno a 20 minutos o media hora en Eibar, como así fue, y ha tenido consecuencias. «Es una auténtica desgracia», ha asegurado Víctor Fernández.