El Mad Cool anunciará cartel de 2025 sin informar como resolverá el problema del ruido

Tras semanas de incógnita y de permitir que sus dos principales rivales en España, el Primavera Sound de Barcelona y el BBK de Bilbao, anunciaran el line up de 2025 finalmente el Mad Cool ha movido ficha y empieza a buscar emocionar al público antes de anunciar el cartel del próximo año. Pero mientras los melómanos y fanáticos especulan sobre la posible presencia de artistas como Olivia Rodrigo o Linkin Park otros se preocupan por los problemas de ruido que asumen volverá a generar el festival. 

Es que aunque el 2024 fue, sin duda, una edición mucho mejor lograda que la de 2023, gracias a un mejor reparto del espacio dentro del recinto y una reducción en el aforo total hicieron del evento quizás la edición menos controvertida del ya mítico festival madrileño. Al mismo tiempo, el ruido que llega a las casas de los vecinos de Getafe y Colonia Marconi, y que los mantiene despiertos desde las pruebas de sonido en la mañana hasta el concierto al final de la tarde. 

El ruido es la gran tarea pendiente del evento, aunque han ido resolviendo poco a poco el resto de los problemas de las últimas ediciones, esta situación termina generando el rechazo de los vecinos y los ha puesto en la mira de la alcaldía de Getafe. Incluso en esa situación, el festival sigue adelante y la edición pasada después de varias dudas no solo recibió el espaldarazo de la alcaldía de Madrid y del gobierno de la Comunidad Autónoma, sino también del entonces líder de la oposición, Juan Lobato, lo que dejaba a la alcaldía de Getafe con pocas armas.

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Incluso si hay una investigación por los problemas de ruido de la edición de 2023, que acumularon tres sanciones por superar los límites de volumen durante la celebración del evento. En total, los promotores pagaron 20.000 euros de multas por esa edición, pero han escapado de momento de la misma situación con la edición de 2024. 

LAS ESPERADAS PANTALLAS ACÚSTICAS DE LA M-45

Mientras tanto, la Comunidad de Madrid ha puesto sobre la mesa la construcción de una pasarela que conectará peatonalmente a Villaverde y Getafe y de varios paneles sonoros en la M-45 que sirvan para mitigar el ruido que llega a las viviendas cercanas al recinto del evento. La primera además sería una importante victoria para los vecinos, pues tienen desde antes de la llegada del festival pidiendo esta pasarela para mejorar la conexión entre los dos poblados. 

En cualquier caso, son medidas que muestran que ni la organización del festival ni los gobiernos del ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid se rinden con el festival. Más allá del Mad Cool lo cierto es que la capital era una de las pocas ciudades europeas sin su gran festival antes de que se empezará a realizar el evento, por aquel entonces celebrado en la Caja Mágica, y hay interés de ambas partes en que se mantenga en la ciudad, incluso si hay algunas asociaciones de vecinos que no comparten este objetivo y consideran que el recinto Iberdrola Music donde se realiza el festival simplemente debería cerrar. 

EL MAD COOL SE DEFIENDE CON SUS INGRESOS

Lo cierto es que la principal defensa del festival sigue siendo el valor económico y cultural que genera para la capital española. Aunque todavía no han presentado los datos de la edición de 2024 si han presentado los de su accidentada edición de 2023 y a pesar de los problemas registrados, el evento generó 46 millones de euros y más de 6.700 puestos de trabajo durante la duración de los conciertos. No es una cifra pequeña, y es un recordatorio de lo valiosos que son estos eventos para las grandes ciudades. 

Aun así, a pesar del apoyo evidente, desde el ayuntamiento se redujo la subvención del festival de un millón de euros en 2023 a 200.000 en 2024. Es una decisión con la que el festival no mostró demasiada incomodidad, pero que demuestra que a pesar de contar con el apoyo del consistorio también saben que si no siguen su proceso para resolver los problemas con los vecinos y con los asistentes pueden terminar por desaparecer, aunque de momento se ven bien encaminados.