Las patatas a la riojana son un guiso tradicional que ha perdurado por generaciones, gracias a su sencillez y sabor inigualable. Este plato, originario de La Rioja, combina ingredientes básicos como patatas, chorizo y pimientos choriceros para crear una explosión de sabor en cada bocado. Aunque es ideal para combatir el frío invierno, su delicioso aroma invita a disfrutarlo en cualquier época del año. Si buscas una receta que nutra el cuerpo y reconforte el alma, este es el guiso que necesitas en tu mesa.
2Cocción lenta: El secreto del sabor
Incorpora las patatas a la cazuela y mézclalas con los ingredientes sofritos. Cubre todo con caldo de carne, asegurándote de que el líquido quede un dedo por encima de las patatas. Lleva la mezcla a ebullición y luego baja el fuego para cocinar lentamente durante unos 30 minutos. Este tiempo permite que las patatas absorban todos los sabores del chorizo y las especias.
Remueve la cazuela de vez en cuando para que la salsa espese de manera uniforme. Si el caldo queda demasiado líquido, aplasta una patata y devuélvela al guiso. Si está muy espeso, añade un poco más de agua fría. Ajusta la sal antes de servir, recordando que el chorizo ya aporta su propio punto salado.