Chus Mateo, expulsado en mitad del tercer cuarto
Ni en casa ni fuera. El Real Madrid de Chus Mateo protagonizó otro desastre y continúa hundiendo aún más su ya mala temporada en la Euroliga, donde acumula nueve derrotas en 15 partidos. El Zalgiris le propinó la tercera derrota consecutiva (83-92), siendo las dos últimas en un WiZink Center que comienza a perder la paciencia con el juego y los tropiezos del equipo. A falta de cuatro minutos y medio, con una desventaja de 17 puntos (69-86), los aficionados comenzaron a abandonar el recinto.
Los blancos podrían argumentar en su defensa la labor de los árbitros, que estuvieron muy desacertados y les sancionaron con cuatro faltas técnicas. Dos de ellas fueron para Chus Mateo, quien fue expulsado a mitad del tercer cuarto, cuando el Madrid intentaba reaccionar. Paco Redondo asumió el mando del equipo. Sin embargo, no hay excusa para otra noche más de frustración y descontrol por parte de los locales.
Chus Mateo, expulsado
Lo que ocurría en la pista reflejaba perfectamente la impotencia de los locales, incapaces de encadenar más de cuatro puntos consecutivos y perdiéndose en constantes protestas. Una de ellas le costó a Facundo Campazzo su tercera falta antes del descanso. El marcador al término de la primera mitad era 38-54.
La reacción del Madrid no tardó en llegar, basada en una defensa intensa que dejó al Zalgiris en solo un punto durante los primeros cuatro minutos y medio. Sin embargo, esa agresividad defensiva provocó que los árbitros pitara más faltas, lo que generó parones y evitó que los blancos pudieran despegarse en el marcador. La situación acabó por irritar a Chus Mateo, quien fue expulsado tras recibir dos técnicas a los 23 minutos.
No levanta cabeza
A pesar de todo, el Real Madrid continuó luchando por reducir la diferencia, mostrando más superioridad de la que reflejaba el marcador. Aunque en algunos momentos dio señales de mejora, a falta de ocho minutos y medio, la desventaja había crecido aún más, superando los 16 puntos con los que se había ido al descanso.
Las sensaciones no mejoraron en el resto del partido, mientras el Zalgiris seguía fallando poco y conseguía una victoria cómoda, dejando al anfitrión cada vez más desesperado. El Real Madrid empieza a ver cómo se le agota el tiempo para salir de manera digna del lío en el que se está metiendo esta temporada.