El técnico italiano paraliza la salida de Arda Güler en enero
Arda Güler está siendo uno de los futbolistas menos utilizados por Carlo Ancelotti desde que llegara al Real Madrid. Así, el joven jugador turco aunque ha mejorado las estadísticas de la temporada pasada, cuando apenas sumó diez partidos, está muy lejos de gozar de todos los minutos que le gustarían.Y es que la media de juego de este curso apenas sobrepasa los 20 minutos en los 17 partidos que ha disputado.
Esta escasa participación dejaba entrever que Carlo Ancelotti podría apostar por su salida en calidad de cedido durante el próximo mercado invernal, sin embargo, el partido ante el Girona FC, donde Arda Güler cuajó una gran actuación culminado con un gol a pase de Belleingham, ha hecho que el italiano cambie de opinión.
Ancelotti encuentra un sitio para Arda Güler
La plaga de lesionados que asola al Real Madrid ha llevado a Carlo Anceotti a dar la alternativa a los jugadores menos habituales. Algunos de ellos han sabido aprovechar esta oportunidad y su futuro podría haber dado un giro de 180º en las últimas horas. El claro ejemplo de esto es Arda Güler, quien hasta el pasado fin de semana tenía pie y medio fuera del Real Madrid.
Tras el encuentro de Montilivi, Ancelotti se está planteando la continuidad del jugador turco reubicándolo dentro del campo. Así, el técnico de Reggiolo considera que Arda Güler puede hacer un buen papel si retrasa su posición para jugar de centrocampista de contención en lugar de mediapunta o extremo diestro.
Descarga de rabia
Arda Güler puso la guinda a su particular pastel de Montilivi anotando su primer gol de la temporada con el Real Madrid a pase de Jude Bellingham, uno de sus grandes defensores dentro del equipo y con quien se abrazó efusivamente cuando fue sustituido. Este gol no solo sirvió al equipo sino también para que el propio jugador se quitara una importante losa de su espalda.
Prueba de que el turco se liberó de esa presión fue su celebración, un festejo donde hubo tiempo para su tradicional gesto y para descargar toda la rabia acumulada. Carlo Ancelotti se hizo eco de ello en la rueda de prensa posterior al encuentro señalando que dicha presión podía estar afectando al futbolista en lo deportivo y en lo anímico.