Cuando se trata de hacer footing, tanto la cinta de correr como correr al aire libre son opciones populares, pero cada una tiene sus ventajas y desventajas. La elección entre una u otra depende de tus objetivos, tu estado físico y tus preferencias personales. A continuación, te explicamos las diferencias clave para que puedas decidir cuál es la mejor opción para ti.
2Impacto en las articulaciones: ¿cuál es más suave?
El impacto es otro factor clave a considerar. Correr sobre superficies duras, como el pavimento, puede ser más exigente para las articulaciones, ya que el impacto en las rodillas y los tobillos es mayor. Sin embargo, caminar o correr sobre superficies blandas, como tierra o césped, ofrece una mayor amortiguación, lo que es menos agresivo para las articulaciones.
Aquí es donde se destaca la cinta de correr, ya que la mayoría de estos equipos están diseñados con una superficie acolchonada que reduce el impacto. Esto la convierte en una opción más suave y segura para aquellos con problemas articulares o lesiones. No obstante, las cintas de correr no ofrecen los mismos beneficios en términos de fortalecimiento óseo que correr al aire libre, donde el impacto sobre superficies duras puede ayudar a mejorar la densidad ósea.