El 23 de noviembre, Yolande Descamps, empleada de Alcampo con 40 años de servicio, fue despedida por «ineptitud». Al día siguiente, la empresa matriz, Auchan, le otorgó una medalla de oro por sus “buenos y leales servicios”. Este insólito caso, ocurrido en Roncq, al norte de Francia, ha generado indignación y debate en toda Europa. La historia de Yolande pone destapó las problemáticas políticas laborales de Alcampo y el trato que tiene la firma con los empleados con discapacidad. A continuación te contaremos por qué la cadena de supermercado tomó la polémica de decisión de despedir a un empleado y a la vez premiarlo.
3La controversia del despido y la entrega de la medalla
El despido de Yolande el 23 de noviembre ya era, de por sí, un hecho polémico. Sin embargo, la situación tomó un giro más irónico al día siguiente, cuando recibió la medalla de oro por sus 40 años de servicio en Alcampo. La ceremonia, una tradición anual de Auchan, busca reconocer a empleados seleccionados por su trayectoria y dedicación.
Para Yolande, este acto fue una demostración de la incoherencia de la empresa. Por un lado, se le agradecía su esfuerzo y compromiso; por otro, se le negaba la posibilidad de seguir trabajando, a pesar de su disposición y experiencia. En sus propias palabras: “Fue un ‘gracias por todo’ seguido de un ‘gracias, adiós’”.
Este gesto generó indignación no solo en Yolande, sino también en otros empleados y en la opinión pública. ¿Cómo puede una empresa premiar a una trabajadora por su lealtad y, al mismo tiempo, despedirla por “ineptitud”? La respuesta de Auchan fue que no existía ningún puesto libre que se ajustara a las condiciones de Yolande, una explicación que ha sido ampliamente cuestionada.