Más de 3,3 millones de autónomos, inscritos en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), se verán impactados por la reforma implementada por la Seguridad Social en España. Entre los cambios más destacados se incluyen la modificación de las cuotas y bases de cotización.
Una reforma por la que a partir de 2025 se calcularán según los rendimientos netos de cada trabajador por cuenta propia, divididos en 15 tramos de ingresos. Así, el el 74% de los autónomos deberá abonar a la Seguridad Social ajustes de cotización en los próximos meses por haber declarado ingresos inferiores a los realmente obtenidos durante 2023.
2025 SERÁ EL PRIMER AÑO DONDE LOS AUTÓNOMOS PAGUEN SUS CUOTAS DESPUÉS DE LA REGULACIÓN DE LA SEGURIDAD SOCIAL
Además, 2025 será el primer año en el que los autónomos paguen sus cuotas después de la primera regularización que Seguridad Social comenzará a realizar en los próximos meses.
Esto, tras cruzar las cotizaciones que pagaron los trabajadores por cuenta propia con los ingresos que declararon en la pasada campaña de la Renta. Por tanto, la Seguridad Social podría modificar su tramo de ingresos, aunque más tarde podrían volverlo a cambiar.
Hasta ahora, los trabajadores por cuenta propia podían elegir su base de cotización dentro de unos límites, independientemente de sus ingresos reales. Este sistema permitía a algunos autónomos pagar una cuota más baja, aunque esto implicara también una menor protección social en el futuro.
Con la nueva normativa, esta libertad desaparece y se establece un sistema que, según el Gobierno, busca una mayor justicia y progresividad en las aportaciones.
En este proceso interviene Hacienda, que, con los datos de la declaración de la renta, informa a la Seguridad Social de los ingresos anuales. La Seguridad Social, entonces, compara los datos:
- Si se ha cotizado por debajo de los ingresos, se exigirá pagar la diferencia.
- Si se ha cotizado de más, se reembolsará el excedente.
De esta forma, las estimaciones apuntan que el 48% de estos trabajadores deberá pagar más de 1.000 euros para regularizar su situación, entre 30 y 80 euros mensuales. O lo que es lo mismo; un 22% pagará entre 100 y 1.000 euros y el 3,5% deberá abonar menos de 100 euros. La notificación de estos ajustes llegará a los autónomos a través del sistema telemático NOTESS, el canal oficial de comunicación de la Seguridad Social.
LOS AUTÓNOMOS CON INGRESOS SUPERIORES A LOS 1700 EUROS VERÁN INCREMENTADAS SUS CUOTAS ENTRE 30 Y 90 EUROS MENSUALES
A partir de 2025, las cuotas mínimas para los tramos de menor ingreso se reducirán. Así, los autónomos que obtengan menos de 670 euros netos mensuales tendrán una base de cotización mínima de 653,59 euros, inferior a los 735,29 euros de 2024, lo que conlleva una disminución en la cuota. Esta reducción también se extiende a los tramos con ingresos de entre 670 y 900 euros, que verán su base mínima de cotización pasar de 816,99 euros a 718,95 euros.
Por otro lado, los autónomos con ingresos medios, situados entre los 1.166,70 y los 1.700 euros, mantendrán una base mínima de cotización estable en comparación con 2024. Estos tramos no experimentarán cambios significativos, lo cual proporciona continuidad para los autónomos de ingresos medios.
Tal y como explica Declarando, estos autónomos no tendrán que hacer nada, ya que la regularización se hará de forma automática por parte de la Seguridad Social, que cargará en sus cuentas el dinero correspondiente.
Estos autónomos «tendrán de plazo hasta el último día laboral del mes siguiente al de la notificación«, informa Declarando. Para los nuevos autónomos que se den de alta a partir de 2025, la reforma incluye la posibilidad de acogerse a la tarifa plana, que consiste en una cuota reducida de 80 euros al mes durante el primer año.
Esta medida se mantendrá como una forma de facilitar el emprendimiento y la incorporación de nuevos trabajadores por cuenta propia, aunque no beneficiará a los autónomos que ya están registrados en el sistema y deben adaptarse a las nuevas cuotas.
