Los consumidores llevan semanas esperando al Black Friday para realizar las compras de Navidad con descuentos importantes. Este año, los regalos serán más caros que nunca y la financiación está a la orden del día, una situación idónea para caer en una trampa financiera.
Hablamos de las tarjetas de crédito, o las conocidas como revolving. En realidad, no es que con el Black Friday se ofrezcan más créditos de esta modalidad, sino que, son muchos los que aprovechan a realizar compras de elevados importes ‘financiando’ dichas adquisiciones con tarjetas revolving, lo que es un gran error.
NO CAIGAS EN LA TRAMPA DE FINANCIAR TUS COMPRAS DEL BLACK FRIDAY CON TARJETA DE CRÉDITO
Y es que, tal y como se desprende del análisis realizado por el comparador financiero de Kelisto, alguien que quiera financiar los gastos del Black Friday por un importe de 1.000 euros a doce meses, pagaría un interés del 7,44% TIN con un préstamo personal, mientras que tendría que asumir un TIN del 18,12% con una tarjeta de crédito.
O lo que es lo mismo; financiando esa compra de 1000 euros con tarjeta, pagaría un 144% más que haciéndolo con un préstamo bancario. Así, y aunque tampoco es una buena solución, los préstamos personales son la opción más barata para financiar las compras navideñas, puesto que las tarjetas de crédito cobran, de media, más del doble en intereses.
En el caso de las tarjetas, la más barata tiene un TIN (Tipo de Interés Nominal) del 5,846%, frente al 21,95% de la más cara. En este sentido, un consumidor decidiera financiar 1.000 euros de gastos navideños en un plazo de un año con la opción más ventajosa se ahorraría más de 90 euros en intereses.
LAS RECLAMACIONES AUMENTAN TRAS LA VUELTA DE ENERO
Algunas tiendas ofrecen financiación en las compras. A veces las condiciones son bastante mejores que las de los bancos. Eso sí, no siempre estas ofertas son las más ventajosas «y, además, sólo sirven para pagar a plazos el producto que vayas a comprar en un determinado establecimiento», advierten en Kelisto.
El cierre del año «es una de esas épocas donde consumimos más, pero tiene que ser un gasto reflexivo e informado. Normalmente las reclamaciones aumentan tras la vuelta de enero», comentan. El gran peligro es caer en el crédito revolving, que promete cuotas bajas pero a cambio carga de intereses las compras y convierte la devolución en eterna. Si no se sabe si es lo que se ha contratado, se pueden revisar los pagos: si las cuotas son bajas, hay que sospechar. Si el interés supera el 20%, también.
El problema de los intereses no sería el único en este Black Friday. Desde AICAR, también denuncian que las rebajas anunciadas, a veces, son solo estrategias de marketing engañosas, con precios inflados. Esto hace que, en realidad, los descuentos no sean tan beneficiosos como parece inicialmente. Un motivo por el que las distintas organizaciones de consumidores recomiendan cerciorarse de que, en realidad, se aplica un descuento que sea ventajoso.
CÓMO COMPRAR MÁS BARATO DURANTE EL BLACK FRIDAY
- Comparar es ahorrar: por un lado, puedes encontrar el mismo producto a precios muy diferentes. Por otro lado, a menudo existe un producto mejor que te puede salir más barato (o con mejor relación calidad/precio). Es complicado orientarse en la jungla de los descuentos: deja que nuestros comparadores te guíen.
- Las compras impulsivas durante el Black Friday nunca fueron buenas: haz una lista de lo que necesitas. Piensa, medita… y de nuevo, compara.
- Prioriza tus compras: algunos productos concretos pueden volar en cuestión de minutos, es importante que los agregues al carrito de compra cuanto antes para no perder la oportunidad.
- Junto al precio rebajado siempre tiene que figurar o el precio original o el porcentaje de la rebaja (o las dos cosas).
- Aunque sean rebajas o Black Friday, las garantías son las mismas de siempre: recuerda que si compras en persona solo están obligados a devolverte el dinero si lo que compras tiene algún defecto de fábrica. Si te arrepientes o te equivocas (unos zapatos que te van pequeños, una prenda que no te gusta) las tiendas no están obligadas a devolverte nada (aunque muchas tienen políticas de devolución con las que si devuelves el producto te dan un vale por el mismo precio para gastar en esa tienda).
- Los productos rebajados tienen que tener la misma calidad de siempre: la norma no permite que se vendan como rebajados productos defectuosos.
- Durante unas rebajas, la tienda puede aplicar algunas condiciones especiales (no aceptar pago con tarjeta, cambiar su política de devoluciones…), pero deben anunciarlo clara y visiblemente para que todos los clientes lo vean.
- El tiquet o factura es lo que necesitas para reclamar si compras en Black Friday: consérvalo.
- Están obligados a darte una Hoja de Reclamaciones si la pides. Debes rellenarla en 3 copias: una para ti, otra para ellos y una tercera que deberás presentar en la Oficina de Consumo.
- En las compras por Internet tienes 14 días para arrepentirte y devolver el producto sin dar explicaciones: tendrán que devolverte todo lo que pagaste. Si vas a pagar online, lo mejor es una tarjeta prepago, una tarjeta de crédito o Paypal. Evita hacer transferencias bancarias si no te fías plenamente del vendedor.