Qué son las flores preservadas

Seguramente alguna vez te has plateado comprar unas flores preservadas porque son flores que no se deterioran y que durarán por mucho tiempo. Este tipo de flores pueden tener muchos usos diferentes tanto en el hogar como en la decoración de todo tipo de eventos, y es por este motivo que hoy vamos a conocer todo respecto a ellas.

Este tipo de flores se destacan por ser flores naturales, y que le darán un toque de color a cualquier espacio donde las quieras utilizar. Son una idea muy bonita cuando no quieres estar cambiando las flores cada dos semanas porque no se marchitan, lo que sin duda será todo un acierto.

¿Qué es una flor preservada?

Una flor preservada es aquella que ha sido sometida a un tratamiento para lograr la deshidratación de la flor. Este tipo de flores conservan la apariencia de las flores naturales, conservándose tiernas y mantienen su olor, pero a diferencia de las flores naturales, este tipo de flores no necesitarán agua.

Estas son las mismas flores que crecen en el campo o los viveros y cuando están en su punto de máximo esplendor se cortarán para aplicar el tratamiento de conservación. Sin embargo, debemos tener en cuenta que no todas las flores son iguales y no todas se pueden preservar, por lo que para algunas únicamente se puede hacer un proceso de secado.

Esto quiere decir que, las flores secas sufrirán un proceso totalmente diferente al de las flores preservadas, pero también tendrán una mayor durabilidad que las flores naturales. Sin embargo, las flores preservadas siempre serán las más resistentes, y lo mejor de todo es que este tipo de flores al mantener su aroma se sentirán como si fueran flores naturales.

Características destacadas de las flores preservadas

Las flores preservadas se destacan de las flores naturales porque tienen diferentes características, dentro de las cuales encontraremos:

Son naturales

Las flores preservadas son también flores naturales, pero estas han sido sometidas a un proceso de conservación cuando estaban en su punto de máximo esplendor. Sin embargo, estas flores siguen siendo como cualquier flor de jardín e incluso conservan el olor natural, lo que a nivel sensorial hace que las flores se sientan fantásticas.

Son a todo color

Si hablamos de flores secas es probable que estas pierdan su color, y muchas personas las confunden con las flores preservadas. El proceso que se realiza para preservar las flores hace que sean a todo color, e incluso se añaden pigmentos que potencian el color de las flores, por lo que obtendrás tonalidades frescas, vivas y atractivas.

Todo esto se logra gracias a los tratamientos más orgánicos de preservación, y a las técnicas más modernas de conservación. Esto permite que los colores sean más naturales y más interesantes, lo que hace que este tipo de flores sean más bonitas a la vista.

Tienen una larga vida

Son flores que tienen una gran resistencia si las comparamos con las flores frescas, porque no dependerán del agua para vivir. El tiempo promedio que puede vivir una flor preservada y mantenerse en perfectas condiciones suele ser de aproximadamente 5 años o incluso más con los cuidados adecuados.

Si quieres prolongar la vida de tus flores preservadas más adelante hablaremos de los cuidados que estas necesitan.

Envejecimiento retardado

El envejecimiento de las flores preservadas es un proceso que se va realizando de una forma muy lenta, y que al igual que en las flores frescas irá afectando su estructura y color. Al principio esto será imperceptible, pero el ramo se irá asentando y madurando, al mismo tiempo que guarda su encanto.

Si las flores no sufren ningún golpe este es un proceso que puede durar fácilmente años, lo que hace que estas flores sean perfectas para decorar estancias sin que tengas ningún inconveniente. En la mayoría de los casos tendrás que decidir por tu cuenta que las flores han cumplido con su ciclo de vida útil y decidirás cambiarlas.

¿Dónde se pueden poner las flores preservadas en casa?

Las flores preservadas son muy versátiles, sin embargo, lo ideal es que las pongas en un lugar templado y sin luz directa del sol. Siempre se deben mantener alejadas de los aires acondicionados porque estos pueden afectar negativamente a las flores preservadas.

Recuerdos que se convierten en decoración

Los ramos de flores preservadas cada vez son más comunes en las bodas, no solo para las novias sino también para dar un recuerdo a los invitados. En todos los casos, este tipo de ramos se convierten en un recuerdo que se podrá conservar por mucho tiempo después del evento.

Las novias actualmente optan por hacer el ramo de novia con flores preservadas y luego incorporarlo en la decoración del hogar. Esto hace que se tenga un recuerdo que durará por mucho tiempo y que será muy bonito para recordar ese día especial.

No importa la ocasión, si compras flores preservadas en una tienda sin duda alguna será un regalo que se quedará en la decoración de quien lo reciba por mucho tiempo. Por este motivo, sin importar si es un regalo de un evento o si se trata de un regalo de cumpleaños o de día de la Madre, estos recuerdos permanecerán en la decoración del hogar.

Tipos de jarrones que les va mejor

Las flores preservadas se pueden poner en cualquier tipo de jarrón, sin embargo, debes asegurarte de que esté completamente seco. Puedes dar rienda suelta a tu creatividad para elegir un jarrón que te guste y que haga destacar los espacios de tu hogar.

Incluso, muchas personas prefieren reutilizar elementos y utilizan alguna lata bonita, una jarra de agua o alguna pieza de madera en la que puedan poner las flores. Al no requerir agua, estas flores son altamente versátiles y se adaptarán fácilmente a cualquier tipo de jarrón en el que las quieras poner.

Muchas personas pueden pensar que estas flores se deben mantener alejadas por haber pasado por un proceso de conservación. La verdad es que los elementos utilizados en el proceso de conservación son inocuos, por lo que no producen problemas de salud. Incluso este tipo de flores son aptas para estar en contacto tanto con niños como con mascotas sin generar problemas de salud.

La decoración con coronas es un toque que está de moda

Estas flores transmiten una gran delicadeza, y pueden ser todo un acierto si las colgamos tras la puerta de la entrada o en alguna pared de tu hogar. Puedes crear una corona de flores preservadas, y le darás siempre un toque muy original y natural a tus espacios.

Para lograr un efecto minimalista y muy bonito en tu hogar, puedes usar una simple base circular de madera, tipo bastidor y ponerle unas flores preservadas. Esto dará como resultado que tendrás un arreglo floral muy bonito y que sin duda llamará la atención de todos los visitantes de tu hogar.

¿Qué cuidados necesitan las flores preservadas?

Los cuidados que requieren las flores preservadas normalmente serán mínimos, y dentro de los más importantes que debes darles estarán los siguientes:

Aléjalas del agua

A diferencia de las flores frescas, para las flores preservadas el agua puede llegar ser el enemigo número uno, porque las puede dañar rápidamente. Debes asegurarte de que el jarrón donde las vayas a poner esté bien seco, y siempre será mejor si los tallos no queden muy pegados al cristal para evitar la formación de humedad.

Durante las épocas de mayor humedad ambiental o si vives cerca al mar, lo mejor será poner estas flores en una zona resguardada y ventilada. De lo contrario, la humedad ambiental puede llegar a afectar negativamente a estas flores reduciendo significativamente su vida útil.

Evita el sol o fuentes de calor

Para las flores preservadas los rayos solares UVA pueden ser muy perjudiciales, porque acelerarán la pérdida de color de las flores. Nunca deberías poner este tipo de flores en un lugar que tengan exposición directa a la luz directa del sol. También debes alejarlas de fuentes de calor artificial como los radiadores de calefacción o los electrodomésticos porque las fibras vegetales se secarán más rápidamente.

Además, si se dan las condiciones en las que se combinen humedad y temperatura alta, la aparición de moho podría ser inminente. Si detectas que tus flores están empezando a formar moho, debes quitarlos de forma rápida con papel de cocina, o incluso corta la zona de la flor.

Para evitar este tipo de inconvenientes, siempre debes asegurarte de mantener estas flores en una zona fresca y que esté muy ventilada, así se reducirán las probabilidades de la aparición de moho en las flores.

Quítales el polvo

Si notas que existe acumulación de polvo en los pétalos de las flores preservadas tendrás que quitarlo para evitar que se dañen. Lo más recomendable es utilizar un cepillo que sea muy suave, o el secador de pelo con aire frío.

Si decides utilizar el secador de pelo con aire frío, asegúrate de ponerlo en la potencia más baja y aplicar el aire al menos a 30 centímetros de las flores. Esto evitará que vayas a dañar los pétalos de las flores con una gran potencia de aire generada por el secador de pelo.

Cuídalas de los insectos

Como pasa con todas las flores, los insectos se sentirán atraídos hacia los ramos de flores preservadas. Los insectos pueden terminar por dañar las flores, por lo que lo más recomendable es que utilices un spray insecticida de vez en cuando sobre los pétalos.

Evita pulverizar el spray sobre los pétalos para que estos no se vayan a dañar por la humedad. También puedes poner una pastilla antipolillas en la base del jarrón para mantener los insectos alejados del jarrón.

Otros cuidados que debes tener con las flores preservadas

Por los cambios de estación, la variación de temperatura y de humedad podría provocar una contracción en las fibras vegetales. Esto podría producir que tus flores desprendan gotas de tinte o de líquido preservante, y aunque es poco frecuente, puede llegar a suceder.

Si esto pasa, no las apoyes en muebles o en tu ropa, y siempre debes ponerlas en un jarrón para evita manchas. Puedes pasarle un papel de cocina en los tallos para asegurarte de secarlos y de que los ramos no estén manchando.

Mitos sobre las flores preservadas

Existen una serie de mitos que existen sobre las flores preservadas que debes conocer para evitar caer en errores sobre este tipo de flores. Los mitos principales alrededor de este tipo de flores son los siguientes:

Son artificiales

Este es un mito muy común que podrás encontrarte, sin embargo, es totalmente falso. Las flores preservadas son flores 100 % naturales que han sido sometidas a un proceso de transformación para estabilizar la planta natural.

En este proceso de conservación no se aportará ningún tipo de elementos plásticos o sedas sintéticas que están presentes en las flores artificiales.

Pueden crecer

Estas flores no tienen la capacidad de seguir creciendo. Son cortadas en el mejor momento de la planta, y se conserva el aspecto de una planta viva. Sin embargo, con el proceso de preservación se detendrá todo el proceso biológico que promueve el crecimiento y envejecimiento de la planta.

Son deshidratadas

El proceso de conservación de las flores preservadas es diferente al proceso que se usa con las flores secas. Por este motivo, las flores preservadas no son deshidratadas y se mantendrán como una flor fresca, y con una apariencia más bonita.

Son tóxicas

Ya habíamos hablado de este temor de muchas personas, pero la verdad es que el proceso de conservación de estas flores no es para nada tóxico. Los productos utilizados en la preservación de estas flores pueden tener contacto con mascotas y personas y no representan ningún riesgo para la salud.

Sin duda alguna, las flores preservadas son todo un acierto si buscas un regalo especial, o si quieres tener una decoración que no se deteriore en tu hogar. En todos los casos, estas flores requieren de muy pocos cuidados y pueden mantenerse en óptimas condiciones por muchos años, por lo que a pesar de que son un poco más costosas que las flores naturales pueden resultar más baratas a largo plazo.