Los aficionados de la Real Sociedad la toman con Barrenetxea
Ander Barrenetxea se ha convertido en el foco de las iras de los aficionados de la Real Sociedad después de la derrota sufrida por el conjunto donostiarra a manos del Athletic Club de Bilbao en San Mamés. Así, a los txuri urdin no les ha gustado la actitud que mostró el jugador al término del encuentro.
Y es que, Barrenetxea aparece en una imágenes bromeando entre risas con dos futbolistas del Athletic Club de Bilbao, Nico Williams y Oihan Sancet, después de que su equipo cayera derrotado en un mal partido. Esta complicidad se la han tomado los donostiarras como un claro síntoma de falta de tensión durante el derbi vasco.
Barrenetxea no fue el único
Entre los jugadores del Athletic Club de Bilbao y la Real Sociedad siempre ha existido una buena sintonía fruto de las filosofías de ambos clubes. Esas buenas relaciones se han podido ver en múltiples ocasiones y el último derbi vasco no fue una excepción. Así, se pudo ver a excompañeros como Zubimendi y Gorosabel o Berenguer y Sadiq, que coincidieron en el Torino, charlar de forma amigable.
Sin embargo, parece que los aficionados donostiarras no van a pasar por alto la actitud de Barrenetxea, a quién tachan como uno de los peores del partido hasta el punto de que fue uno de los primeros jugadores que abandonó el campo por decisión de su entrenador, Imanol Alguacil, dejando su sitio a Becker en el minuto 60.
El Athletic puede aprovechar el enfrentamiento
La imagen de los jugadores del Athletic Club de Bilbao hermanados con los de la Real Sociedad pese a la rivalidad de los equipos está dando la vuelta al mundo como un ejemplo a seguir. Sin embargo, los aficionados donostiarras no comparten la misma visión y consideran que a sus futbolistas les falta tensión en partidos como este derbi vasco y, por ello, está cargando con dureza contra jugadores como ‘Barrene’.
Este enfrentamiento podría abrir una puerta al Athletic Club de Bilbao para hacerse con un delantero prometedor como Barrenetxea a bajo coste. Y es que, la falta de sintonía con la grada podría conllevar la salida del atacante de 22 años, que podría buscar una nueva casa en Bilbao antes de finalizar su contrato con la entidad de San Sebastián.