Felipe VI ha implementado cambios estructurales en la Casa Real que han captado la atención de medios internacionales. La publicación alemana Bunte ha señalado que estas decisiones representan un «giro de 180 grados» en la gestión del soberano, marcando un antes y un después en la historia de la monarquía española.
Con motivo del décimo aniversario de su reinado, Felipe VI ha impulsado reformas significativas que incluyen, por primera vez, la incorporación de mujeres en altos puestos clave del Palacio de la Zarzuela. Según Bunte, estos cambios “sorprenden” y “ofrecen la oportunidad de mejorar algo”, reflejando un ambiente de optimismo y renovación.
6El papel de Felipe VI en la formación de la princesa Leonor como futura reina
Felipe VI ha desempeñado un papel crucial como padre en la formación de la princesa Leonor, preparando a su hija mayor para asumir las responsabilidades de ser la futura reina de España. Desde una edad temprana, el monarca ha inculcado en Leonor valores como el respeto, la responsabilidad y la dedicación al servicio público, pilares fundamentales en su visión de la monarquía moderna. Felipe ha demostrado un enfoque cercano y pedagógico, combinando su rol como padre con su deber de mentor, guiándola en cada paso de su preparación.
La relación entre Felipe VI y Leonor se ha caracterizado por un equilibrio entre el cariño paternal y la formación institucional. Durante eventos oficiales, el rey no solo ha supervisado su desempeño, sino que también ha actuado como un ejemplo a seguir, mostrándole cómo manejar situaciones de alto nivel con serenidad y profesionalismo. Este vínculo cercano ha sido evidente en momentos clave, como cuando Leonor pronunció su primer discurso público en los Premios Princesa de Asturias, ocasión en la que Felipe estuvo presente para apoyarla y brindarle confianza.
Además de la preparación formal, Felipe VI ha procurado transmitir a Leonor una perspectiva humana y cercana sobre su papel futuro. A través de conversaciones privadas y experiencias compartidas, el monarca ha intentado que Leonor comprenda no solo las obligaciones de su posición, sino también su importancia para los ciudadanos. Este enfoque integrador refuerza la visión de Felipe de una monarquía al servicio del pueblo, asegurando que su hija esté plenamente preparada para liderar con empatía y compromiso.