Una de las grandes preguntas que debe estar haciéndose actualmente Nico Williams es por qué el FC Barcelona, si aparentemente tenía todo listo para ficharlo en la pasada ventana de transferencias, finalmente no pudo concretar su operación. Es una duda que también comparten los fanáticos y expertos en deportes, quienes hace algunos meses daban por confirmado el cambio de aires del futbolista del Athletic Club hacia el Camp Nou.
Sin embargo, el traspaso del joven delantero de 22 años no se materializó, y por ello continúa en San Mamés, un club que ama y donde cree que aún tiene mucho más por aportar. En varias oportunidades, Williams ha manifestado su confianza en el proyecto deportivo de los bilbaínos, en el que es una pieza clave.
Aun así, resulta llamativo que los culés buscaran hacerse con sus servicios sin lograrlo. Como entre cielo y tierra no hay nada oculto, ya se conoce el motivo por el cual el Barça de Joan Laporta cambió de objetivo en el mercado, una razón que el propio jugador ya tiene clara.
De hecho, a estas alturas, las probabilidades de que los catalanes vuelvan a luchar por él son bajas. Sin embargo, hay quienes mantienen la esperanza de que, en los próximos meses, un posible cambio radical en la directiva culé permita retomar las negociaciones por el futbolista de la selección española, y que finalmente se concrete esa dupla de ensueño con su gran amigo Lamine Yamal.
En el siguiente artículo, repasaremos todo lo ocurrido con este fichaje fallido.
2Un verano marcado por idas y vueltas
Destacar que el nombre de Nico Williams estuvo en el centro de todas las miradas durante el mercado estival del Barça.
Pues desde el inicio de la ventana de fichajes, su llegada parecía más que factible, pero tras semanas de negociaciones y rumores, el jugador optó por seguir defendiendo los colores del Athletic Club al menos por una temporada más.
Todo indica que esta decisión generó dudas y especulaciones entre los seguidores blaugranas, sobre todo por la falta de claridad en las razones que motivaron este desenlace.