Las aerolíneas Ryanair, Vueling, easyJet, Norwegian y Volotea han recibido una multa histórica de 179 millones de euros por prácticas abusivas contra los consumidores. El Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 ha sancionado a estas compañías por diversas prácticas que perjudican a los pasajeros. Esta decisión supone una victoria para los derechos de los consumidores y un precedente importante en la lucha contra las prácticas abusivas en el sector aéreo. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) celebra esta sanción y urge a las aerolíneas a cesar estas prácticas de forma inmediata.
Las aerolíneas han sido multadas por una serie de prácticas que la OCU lleva tiempo denunciando:
- Cobro por la reserva de asientos contiguos para menores y personas dependientes: Esta práctica se considera abusiva ya que se aprovecha de la necesidad de las familias y personas con discapacidad de viajar juntos, obligándoles a pagar un extra por un servicio que debería ser básico. Se trata de una clara vulneración de los derechos de los consumidores.
- Sobrecoste por el equipaje de mano en cabina: Esta práctica es especialmente controvertida, ya que el equipaje de mano siempre se ha considerado un elemento incluido en el precio del billete. Obligar a los pasajeros a pagar un suplemento por llevar una maleta pequeña en cabina se considera una práctica abusiva y engañosa. Además, a menudo las dimensiones permitidas son tan reducidas que obligan a facturar maletas que antes se podían llevar sin coste adicional.
- Falta de transparencia en el precio final: La opacidad en la información precontractual sobre el precio final del servicio es otra de las prácticas sancionadas. Muchas aerolíneas muestran precios atractivos en la publicidad, pero luego añaden tasas y suplementos que encarecen considerablemente el coste final del billete. Esta falta de transparencia dificulta la comparación de precios y perjudica a los consumidores.
- Restricciones en el pago en metálico: La prohibición del pago en metálico, tanto en el aeropuerto como a bordo del avión, también ha sido objeto de sanción. Esta práctica limita las opciones de pago de los consumidores y puede ser discriminatoria para ciertos colectivos.
- Suplemento por reimpresión de la tarjeta de embarque: En el caso de Ryanair, se ha sancionado específicamente el cobro de un suplemento por la reimpresión de la tarjeta de embarque en el aeropuerto. Esta práctica se considera abusiva al penalizar a los pasajeros que hayan perdido o no hayan podido imprimir su tarjeta de embarque previamente.
El futuro de la sanción y la lucha contra las prácticas abusivas
La sanción impuesta a las aerolíneas, que asciende a 179 millones de euros, se distribuye de forma proporcional a los beneficios obtenidos mediante estas prácticas. Ryanair, con 107,77 millones de euros, es la aerolínea más afectada, seguida de Vueling (39,2 millones), easyJet (29,94 millones), Norwegian (1,6 millones) y Volotea (1,18 millones). Es importante destacar que las compañías afectadas han manifestado su intención de recurrir la sanción.
Este recurso podría permitirles continuar con estas prácticas abusivas mientras se resuelve el proceso judicial. Por ello, la OCU solicita al Ministerio que, en caso de recurso, solicite la aplicación de medidas cautelares. Estas medidas obligarían a las aerolíneas a cesar las prácticas sancionadas de forma provisional, evitando así que continúen perjudicando a los consumidores.
La OCU considera esta sanción un paso importante en la defensa de los derechos de los consumidores en el sector aéreo.