Así es, un farmacéutico nos explica por que no somos capaces de percibir un olor desagradable en nosotros mismos. La higiene personal es una preocupación constante para muchas personas. Sin embargo, en ocasiones, hay quienes, a pesar de desprender un olor desagradable, parecen no darse cuenta. Este fenómeno, que ha despertado la curiosidad de muchos, tiene una explicación científica. Según el farmacéutico Fernández, conocido por compartir curiosidades médicas en redes sociales, la respuesta está en una característica de nuestro cerebro que se llama adaptación olfativa.
2El caso de los perfumes: otra cara de la adaptación olfativa
El mismo principio se aplica al uso de perfumes o colonias. Muchas personas tienden a rociarse grandes cantidades de su fragancia favorita sin darse cuenta de que ya es suficiente. Al igual que ocurre con el olor corporal, nuestro cerebro deja de registrar el aroma del perfume después de un tiempo. Esto puede llevar a un exceso en la aplicación, que lejos de ser agradable, puede resultar molesto para los demás. Este comportamiento ilustra cómo la adaptación olfativa afecta nuestra percepción tanto en situaciones de mal olor como en el uso de fragancias.