El salario medio en España alcanza su máximo desde 2006, con 2.273 euros

El salario medio en España alcanzó su máximo histórico en 2023, impulsado por un crecimiento sostenido y la subida del salario mínimo. Analizamos las cifras, la brecha salarial y las perspectivas para el futuro del mercado laboral.

El salario medio mensual bruto en España se situó en 2.273 euros en 2023, marcando un récord desde el inicio de la serie histórica en 2006. Este dato representa un incremento del 7,3% respecto al año anterior, el mayor aumento desde 2008. Este séptimo año consecutivo de crecimiento salarial consolida una tendencia positiva tras la bajada registrada en 2016. El aumento del salario medio es un indicador positivo de la salud económica del país, aunque es fundamental analizarlo en conjunto con otros factores como la inflación y el coste de la vida.

Por otro lado, el salario mediano, que representa el punto medio de la distribución salarial, alcanzó los 1.935,5 euros brutos mensuales en 2023. Este valor, un 7,4% superior al del año anterior, muestra una evolución paralela al salario medio, lo que sugiere una distribución salarial relativamente estable. El incremento del salario mediano, al igual que el del salario mínimo interprofesional (SMI), contribuye a reducir la desigualdad salarial y a mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores con menores ingresos. La subida del SMI, del 54% entre 2017 y 2024, hasta los 1.134 euros mensuales, ha tenido un impacto significativo en los salarios más bajos, impulsando el crecimiento del salario mediano.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) divide a los 18 millones de asalariados en diez grupos (deciles) según sus ingresos. El 40% de los asalariados se encuentran en el decil central, con salarios entre 1.534,7 y 2.548,2 euros brutos mensuales. Tanto por encima como por debajo de este tramo se encuentra otro 30% de los asalariados, lo que refleja la distribución salarial en España.

Brecha salarial y factores determinantes

A pesar del crecimiento generalizado de los salarios, persisten desigualdades significativas en función del género, la edad, el tipo de contrato y el nivel de formación. Estas diferencias salariales reflejan la necesidad de implementar políticas que promuevan la igualdad de oportunidades en el mercado laboral.

  • Brecha de género: El salario medio de las mujeres (2.063,2 euros) sigue siendo inferior al de los hombres (2.467,9 euros). Esta diferencia se atribuye, en parte, a la mayor proporción de mujeres con contratos temporales, jornadas parciales y en sectores con menor remuneración. Es crucial abordar esta brecha salarial mediante medidas que promuevan la igualdad salarial y la conciliación familiar.
  • Edad: Los jóvenes menores de 25 años presentan los salarios más bajos (1.387,4 euros), mientras que los trabajadores entre 45 y 55 años registran los salarios más altos (2.522,2 euros). Esta diferencia se debe, en parte, a la mayor experiencia y antigüedad de los trabajadores de mayor edad. Es importante fomentar la inserción laboral de los jóvenes con salarios dignos y oportunidades de desarrollo profesional.
  • Tipo de contrato: Los trabajadores con contratos temporales perciben un salario medio inferior (1.832,3 euros) al de los indefinidos (2.363,2 euros). Esta diferencia refleja la precariedad laboral asociada a la temporalidad y la necesidad de promover la estabilidad en el empleo. La contratación indefinida debe ser el modelo principal de acceso al mercado laboral, garantizando la estabilidad y los derechos de los trabajadores.
  • Nivel de formación: Las personas con menor nivel de formación también presentan salarios más bajos. La formación continua y la adaptación a las nuevas demandas del mercado laboral son fundamentales para mejorar la empleabilidad y los salarios. Invertir en educación y formación es clave para el desarrollo económico y social del país.