Un lienzo de la icónica serie «Nenúfares» de Claude Monet ha sido subastado en Nueva York por la impresionante cifra de 65,5 millones de dólares (más de 61 millones de euros), consolidando el atractivo perdurable del maestro impresionista en el mercado del arte. La venta, celebrada en Sotheby’s, superó las expectativas iniciales de 60 millones de dólares, gracias a la intensa puja entre tres coleccionistas, uno de los cuales, de origen asiático, se alzó finalmente con la obra.
Este precio, aunque notable, no supera el récord alcanzado en 2019 por otra escena de la serie «Pajar», que se vendió por 110,7 millones de dólares. Sin embargo, se sitúa como la segunda cifra más alta pagada por una obra de la serie de los «Nenúfares», superando los 84,7 millones de dólares de otra vista de «Nenúfares» vendida en 2018.
La serie «Nenúfares», iniciada a finales de la década de 1890, se convirtió en la obsesión y pasión de Monet durante sus últimos años de vida. El óleo subastado, de más de un metro de alto y firmado por el artista tanto en el reverso como en el bastidor, representa la belleza etérea y la serenidad características de esta emblemática serie. La subasta marca un hito en la historia del arte, ya que era la primera vez que esta escena particular de «Nenúfares» salía al mercado.
La procedencia del cuadro añade aún más interés a su historia. Formaba parte de la colección de Sydell Miller, una empresaria de la industria cosmética cuyo legado artístico, valorado en 170 millones de dólares, incluía obras maestras de artistas como Pablo Picasso, Yves Klein, Henri Matisse y una singular colección de muebles con temática animal de François-Xavier y Claude Lalanne. La venta de este Monet es solo uno de los 58 lotes pertenecientes a la colección personal de Miller que han salido a subasta, demostrando el exquisito gusto y la aguda visión de esta coleccionista.
Picasso, Kandinsky y otras joyas artísticas bajo el martillo
La subasta de Sotheby’s no se limitó a la obra maestra de Monet. Otras piezas de renombre alcanzaron cifras millonarias, confirmando el dinamismo del mercado del arte. Entre ellas, destaca «La Statuaire» de Pablo Picasso, pintada en 1925, que se adjudicó por 24,8 millones de dólares (22 millones de euros). Otra obra de Picasso, «Tête de femme», un busto de bronce, alcanzó los 6,9 millones de dólares (6,63 millones de euros).
El arte moderno y contemporáneo también tuvo su protagonismo. «Weisses Oval» de Kandinsky alcanzó los 21,6 millones de dólares, mientras que «Relief Éponge bleu sans titre» de Yves Klein se vendió por 14,2 millones de dólares. La lista de obras destacadas se completa con «Jeune fille en robe rose» de Henri Matisse (9,7 millones de dólares), una obra sin título de Mark Rothko (5 millones) y «Les trobles du coeur» de Magritte (2 millones).
La escultura no se quedó atrás, con piezas de Joan Miró y Edgar Degas alcanzando precios considerables. «Personnage» de Miró se vendió por 8 millones de euros, y «Femme», también de Miró, por 1,89 millones de euros. Una de las icónicas bailarinas de Degas se adjudicó por 1,59 millones de euros.