Para nadie es un secreto que el desempleo es uno de los grandes problemas de la España del siglo XXI, lo que se traduce además en largos periodos de tiempo en búsqueda de empleo para los trabajadores que se quedan en el paro por cualquier motivo. Según el más reciente estudio publicado por la Unión Sindical Obrera (USO) el mayor porcentaje de demandantes de empleo tienen dos años en el paro, lo que quiere decir que ya no reciben los beneficios de desempleo en el país.
«Este volumen de parados de larga duración (todos aquellos con más de 2 años dejan de percibir la prestación contributiva) nos debería llevar a replantear la intermediación laboral que realizan los Servicios Públicos de Empleo y como poner los medios para ser más eficientes en ayudar a la búsqueda y consecución de un puesto de trabajo», explican desde el sindicato, señalando la necesidad no solo de buscar otras estrategias que generen empleo. Se suma a esto tanto las dificultades en el país para crear puestos de trabajo como para llenar algunos para los que los españoles ni siquiera se presentan como candidatos.
Lo cierto es que la situación en sectores como la construcción o la hostelería muestra que a pesar de la tasa de desempleo de 11,5% no siempre es fácil conseguir trabajadores. Se suma a este dato la dificultad particular para tener mano de obra especializada en estos espacios. No hay soluciones fáciles, por un lado, es de esperar que algunos trabajadores prefieran esperar a una mejor oferta mientras siguen cobrando el paro, por otro lado, estos sectores no suelen tener ganancia suficiente para que se pague más de lo que se paga muchas veces.
LAS MUJERES TARDAN MÁS TIEMPO BUSCANDO EMPLEO
Se suma además la diferencia en los tiempos de espera entre géneros. Mientras que los hombres que superan los dos años en búsqueda son solo el 10,6% de los demandantes de empleo, mientras que las mujeres en la misma situación representan casi el 20% del total. Es un dato necesario e importante a tener en cuenta al diseñar políticas para enfrentar esta realidad, sobre todo por qué el mismo informe demuestra que no todas las políticas actuales han funcionado tan bien como lo asegura la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, al hablar de los efectos de la ley.
CONTRATOS TEMPORALES
«Con respecto a 2021, antes de la reforma laboral, se ha producido un notable incremento de la contratación indefinida. Sin embargo, la situación a lo largo de 2024 es que el porcentaje de contratos indefinidos está disminuyendo y ha bajado de los valores por encima del 45%% en que se situó en 2022», asegura el informe de la USO al analizar los efectos de la ley de la reforma para mejorar la situación.
Se suma que aunque los contratos indefinidos son un mayor porcentaje del total, alrededor de 43,5% en comparación a octubre de 2021, cuando apenas llegaba al 10,49%, sigue siendo menos de la mitad y son menos que en 2022, cuando eran 45,75% y 43,59%. El resto de los contratos siguen siendo alguna versión de un contrato temporal, 21,3% de ellos por debajo de una semana.
«Dos de cada 5 contratos temporales duran menos de una semana ¿Estos contratos son los que se realizan de lunes a viernes? ¿Esto coincide con el saldo negativo de afiliación a la seguridad social que se vienen produciendo todos los viernes? Además, un 58,4% de los contratos temporales que se realizan tienen una duración media inferior a un mes», explica el informe.
¿CÓMO RESOLVER LOS DATOS DE BÚSQUEDA DE EMPLEO?
La realidad es que sigue siendo complicado reducir el dato de personas en paro y de demandantes de empleo. Este dato sigue siendo demasiado alto, 11,21% de desempleo, a finales del mes de octubre, y aun en esa situación sigue habiendo puesto de trabajo que son complicados de ocupar en el medio plazo. Será interesante ver si se consiguen estrategias para acercarse al sector de la hostelería y de la construcción, que son los que más sufren de estos males.
En cualquier caso, lo que es evidente es que la reforma laboral no ha sido suficiente para resolver del todo el problema. Sin ir más lejos los datos del mes de octubre en cuanto a contrataciones y afiliaciones a la seguridad social han sido negativos, «Lo que vemos al analizar el comportamiento de este mes es que los flujos de entrada y salida nos dan un valor que no podemos calificar de histórico, destruimos más contratos que los que se realizan. Se está produciendo una rotación muy alta en el empleo», asegura el informe.
Será llamativo saber qué ocurrirá en el corto plazo, si habrá otro tipo de medidas. De momento no hay planes a futuro, y aunque la temporada navideña suele generar un nuevo pico de contrataciones, sigue siendo importante reducir los datos de personas esperando trabajo en los próximos años.
