Gil Marín, Consejero Delegado del Atlético de Madrid, no quiere quedarse de brazos cruzados y ya está preparando su hoja de ruta de fichajes para los venideros ciclos de transferencias. La entidad rojiblanca tiene la difícil tarea de lograr buenos lugares tanto en LaLiga como de avanzar en esta nueva Champions League. En este sentido, el propietario del club sabe que, para poder lograrlo, tiene que sumar más refuerzos a sus filas.
Al menos en el torneo local, han podido mantenerse entre los tres primeros lugares. Sin embargo, en competiciones europeas sí que han quedado a deber un poco, aunque en la pasada jornada lograron una victoria agónica ante el conjunto del PSG que les devolvió el alma al cuerpo.
En cierto modo, Gil Marín confía en su plantilla, pero no le vendría nada mal incluir nuevos talentos que ayuden a potenciar sus alineación. Y es que tras la salida de Samu Omorodion, muchos fans le cayeron encima a la entidad por ese movimiento tan sorpresivo. Y ahora Samu ha logrado su redención en Portugal con el Porto, a tan solo pocos meses de haber llegado a dicha entidad deportiva.
Pese a esto, parece que el equipo de Diego Simeone quiere superar este trago amargo incluyendo a un futbolista que incluso ellos creen que podría ser mejor que el delantero centro español de 20 años de edad.
En el siguiente artículo te contaremos quién es ese futbolista que podría llegar al Cívitas Metropolitano en los siguientes mercados de fichajes de manera sorprendente.
6La llegada de Gyokeres, una inversión a futuro
Así las cosas, el posible fichaje de Viktor Gyokeres no solamente se ve como una solución inmediata, sino también como una inversión a largo plazo.
Pues con solo 25 años de edad, el delantero sueco tiene la madurez necesaria como para poder adaptarse rápidamente al sistema de Simeone, pero también el potencial para seguir creciendo y convertirse en uno de los goleadores más temidos del continente.
Eso sí, la apuesta por Gyokeres sigue la filosofía que el Atlético ha seguido en los últimos años que consiste fichar jugadores con proyección, pero con la capacidad para marcar la diferencia en los partidos más exigentes.