En el vasto mundo de Internet, las estafas evolucionan constantemente, y los ciberdelincuentes encuentran nuevas formas de engañar a los usuarios. Una de las estafas más recientes y peculiares es la conocida como «el gato de bengala». Este fraude ha afectado principalmente a internautas australianos, pero podría expandirse rápidamente. Descubre cómo funciona esta estrategia y cómo protegerte.
1La trampa detrás de una búsqueda inocente
Todo comienza con una simple búsqueda en Google: «¿Son legales los gatos de Bengala en Australia?». Los ciberdelincuentes han aprovechado la popularidad de este tema para posicionar enlaces maliciosos en los primeros resultados utilizando una técnica llamada envenenamiento SEO. Esta práctica les permite manipular el algoritmo de los motores de búsqueda y hacer que sus páginas fraudulentas aparezcan como legítimas. Cuando los usuarios desprevenidos hacen clic en estos enlaces, son redirigidos a sitios web diseñados específicamente para robar datos personales, incluyendo información bancaria y contraseñas. Este tipo de ataque es especialmente peligroso porque se basa en la confianza que los usuarios tienen en los resultados de búsqueda de Google.