La Dirección General de Tráfico (DGT) continúa implementando medidas estrictas para elevar la seguridad en las carreteras y reducir el número de accidentes y víctimas fatales. En 2023, las cifras de mortalidad vial en España aumentaron un 5% respecto al año anterior, alcanzando un total de 1.145 fallecidos. Por esta razón, la DGT ha impulsado nuevas normativas y sanciones, destacando la importancia de que los conductores cumplan con los requisitos básicos, como llevar ciertos documentos en el vehículo en todo momento. En este artículo, analizaremos estos documentos y otras obligaciones clave para evitar sanciones y contribuir a una circulación más segura.
3Nuevas multas de la DGT: lo que debes saber
La reforma de la Ley de Tráfico, impulsada por la DGT, introduce nuevas multas y endurece las sanciones en caso de infracciones graves y muy graves. La ley establece tres tipos de infracciones: leves, graves y muy graves, con sanciones económicas que van desde los 100 euros en infracciones leves hasta los 500 euros en las muy graves.
Las infracciones muy graves, que conllevan una multa de 500 euros, incluyen situaciones como el uso de dispositivos de intercomunicación no autorizados en exámenes para obtener o recuperar el carné de conducir, arrojar objetos a la vía que puedan provocar incendios o accidentes, e incumplir normas de auxilio en las vías públicas o relacionadas con el uso de alcoholímetros antiarranque. Estos comportamientos ponen en riesgo no solo la seguridad del conductor, sino también la de los demás usuarios de la vía, por lo que la DGT ha decidido imponer sanciones ejemplares para quienes los realicen.
En cuanto a las infracciones graves, que implican multas de 200 euros, se incluye el estacionamiento en carriles o vías no habilitadas para tal fin. Esta acción obstaculiza el tránsito y puede generar accidentes, por lo que la DGT busca desincentivarla mediante sanciones. Además, incumplir la obligación de estar “en todo momento en condiciones de controlar el vehículo” se considera una infracción leve, con una multa de hasta 100 euros, ya que afecta la capacidad de reacción del conductor ante cualquier imprevisto.