La relación entre la princesa Leonor y su padre, el rey Felipe VI, ha demostrado ser un pilar fundamental en la vida de la futura reina de España. Padre e hija comparten no solo un vínculo familiar cercano, sino también una serie de valores y responsabilidades que los unen de manera especial, consolidando una conexión única. En cada aparición pública se refleja el afecto y el respeto que ambos se profesan, así como el compromiso que comparten con la Corona.
Sin embargo, no todo es sencillez en esta relación tan especial. Aunque el rey Felipe siempre muestra su cariño y apoyo a Leonor, también asume su rol paternal con firmeza, corrigiéndola cuando lo considera necesario. La dinámica entre ambos es un reflejo de cómo se están formando los cimientos de una futura monarquía, donde el amor, la disciplina y el respeto son la clave.
4El rey, firme con la princesa Leonor cuando es necesario
A pesar del cariño y la cercanía que existe entre ambos, Felipe no deja de asumir su papel de padre en toda su extensión, incluyendo el de ser una figura de autoridad que corrige cuando es necesario. La periodista Pilar Eyre ha mencionado que Felipe no duda en llamar la atención a Leonor si considera que ha cometido algún error, una actitud que refleja su compromiso con la formación integral de su hija.
Un ejemplo reciente fue durante los premios en Oviedo, cuando el rey le recordó a Leonor que debía atender a su abuela, la reina Sofía, después de la ceremonia. Esta corrección, aunque sutil, muestra la voluntad de Felipe de inculcar en Leonor el respeto hacia la familia y las tradiciones reales. Aunque esto pueda parecer un detalle menor, demuestra que, para el rey, la preparación de Leonor implica una educación completa en valores y en protocolo.