En un contexto donde las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) se están implementando en ciudades de más de 50.000 habitantes en toda España, los vehículos sin distintivo ambiental y los que portan la etiqueta B de la Dirección General de Tráfico (DGT) se enfrentan a cada vez más limitaciones. Las restricciones actuales dificultan que estos coches puedan circular en los centros urbanos de ciudades como Madrid o Barcelona, y la proyección es que estas limitaciones aumenten con el tiempo. Sin embargo, existe un resquicio legal que permite a algunos propietarios cambiar la etiqueta de su coche de B a C, obteniendo así acceso a un mayor número de zonas. A continuación, te explicamos en detalle en qué consiste este procedimiento, qué necesitas para realizarlo y cuáles son los beneficios de hacerlo.
4Cómo solicitar el cambio de etiqueta en la DGT
Una vez en posesión del certificado de conformidad, el paso siguiente es realizar la solicitud formal ante la DGT. Este procedimiento es relativamente sencillo y, aunque implica una pequeña inversión de tiempo y dinero, el beneficio de obtener la etiqueta C hace que valga la pena.
Paso a paso para realizar el cambio de etiqueta
- Acude a una oficina de la DGT: La solicitud del cambio debe realizarse en persona en una oficina de la DGT. Lleva contigo el certificado de conformidad, el permiso de circulación y el DNI.
- Completa el formulario de solicitud: En la DGT, recibirás un formulario específico para solicitar el cambio de distintivo ambiental.
- Paga la tasa correspondiente: La DGT cobra una pequeña tarifa por la gestión del cambio de etiqueta, aunque los costes son menores en comparación con los beneficios a largo plazo.
- Espera la aprobación: Tras la solicitud, la DGT procederá a revisar los documentos y, una vez aprobado el cambio, te notificará para que puedas recoger tu nueva etiqueta.
Una vez la DGT apruebe el cambio de distintivo, obtendrás la etiqueta C, lo que implica un permiso de circulación más amplio en zonas de bajas emisiones y evita posibles sanciones futuras. Esta mejora en la movilidad urbana representa una ventaja significativa, especialmente para aquellos que viven en grandes ciudades o en sus cercanías.