La salida de Leire Martínez de La Oreja de Van Gogh, después de 17 años como vocalista, dejó a la banda y a sus seguidores en shock. El comunicado oficial, emitido el 14 de octubre, hablaba de «diferentes maneras de vivir el grupo», pero no ofrecía una explicación clara sobre las razones de su partida.
Leire, sin embargo, decidió romper su silencio en «Me quedo conmigo», una serie documental de Mediaset España que aborda la salud mental. En la entrevista, la cantante se sinceró sobre su experiencia en la banda, revelando sentimientos de soledad, invisibilidad y falta de apoyo.
1El peso de la invisibilidad
«Me cuesta poner límites porque muchas veces he tenido la sensación de que no han sabido quererme«, confesó Leire, con la voz entrecortada por la emoción. «Me he sentido muy sola».
Leire explicó que la sensación de no ser valorada, de no ser «suficiente», la acompañó durante gran parte de su tiempo en la banda. La constante presión de las entrevistas y los rumores sobre un posible regreso de Amaia Montero, la antecesora de Leire, intensificaron este sentimiento de invisibilidad.