La Ruta de las Caras, ubicada en la provincia de Cuenca, es un destino que combina arte, naturaleza y aventura en un entorno poco conocido pero fascinante. Este sendero, que se extiende a lo largo de aproximadamente 3 kilómetros, se ha convertido en un lugar de interés para aquellos que buscan una experiencia única y un contacto más cercano con el arte al aire libre. Hoy, exploraremos las características más destacadas de esta ruta, su historia, las obras que alberga y consejos prácticos para disfrutarla al máximo.
5Actividades complementarias en la zona
Además de la Ruta de las Caras, la zona ofrece otras actividades interesantes. Los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de rutas de senderismo más largas en el Parque Natural de la Serranía Baja. También se pueden realizar actividades como la observación de aves, ya que la región alberga diversas especies. Para aquellos que buscan una experiencia cultural más amplia, la ciudad de Cuenca, famosa por su casco antiguo y sus casas colgadas, se encuentra a solo unos minutos en coche y ofrece una rica historia y patrimonio arquitectónico.