La OCU deja claro cuál es la calefacción más barata para este invierno

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A medida que las temperaturas descienden y se acerca el invierno, muchas familias empiezan a plantearse la mejor forma de calentar sus hogares sin que esto implique un golpe a sus bolsillos. En un país donde el gasto energético representa una carga importante en los presupuestos familiares, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha presentado un estudio que busca identificar cuál es la opción más económica para mantener el hogar caliente. A continuación te contaremos cuál es el método más efectivo y económico para no pasar frío este invierno.

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Biomasa: una alternativa ecológica y eficiente recomendada por la OCU

Biomasa: una alternativa ecológica y eficiente recomendada por la OCU

Otra opción bien valorada en el informe de la OCU es el uso de biomasa. Este sistema utiliza estufas o calderas que aprovechan residuos orgánicos como pellets, huesos de aceituna o restos de podas. Las estufas de biomasa pueden calentar el aire de una estancia, mientras que las calderas están diseñadas para calentar agua que luego se distribuye por radiadores o suelos radiantes. La OCU destaca que este sistema es una opción sostenible al no emitir CO₂ durante su funcionamiento.

En cuanto a la inversión inicial, las estufas de biomasa suelen ser más asequibles, con un coste aproximado de 1.650 euros. El gasto anual de este sistema es también competitivo, con un promedio de unos 393 euros, similar al de la bomba de calor. A pesar de estos beneficios, la OCU advierte que la biomasa requiere un mantenimiento regular, ya que es necesario eliminar las cenizas de la combustión y contar con un conducto de evacuación de humos hacia el exterior.

Además, este sistema es recomendable para viviendas con suficiente espacio de almacenamiento, porque los pellets o residuos deben guardarse en un lugar seco y bien ventilado. La OCU señala que la biomasa puede ser una opción ideal para casas de campo o viviendas aisladas, donde el acceso al suministro de pellets es sencillo. Aunque no es tan versátil como la bomba de calor en términos de refrigeración, la biomasa ofrece una opción económica y ecológica para quienes buscan reducir su huella de carbono.