España y Líbano han unido fuerzas para exigir un alto el fuego permanente e inmediato en el conflicto que asola al país mediterráneo. Esta petición, crucial para la estabilidad de la región, se ha formalizado a través de un comunicado conjunto tras la reunión entre el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, y su homólogo libanés, Abdalá Bou Habib, en el marco de la reunión ministerial de la Unión por el Mediterráneo (UpM) celebrada en Barcelona.
La resolución 1701
El comunicado conjunto enfatiza la necesidad de aplicar íntegramente la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Esta resolución, fundamental para la resolución del conflicto, busca el restablecimiento de la soberanía libanesa sobre todo su territorio, incluyendo el sur del país, actualmente bajo la influencia del partido-milicia chií Hezbolá. Además, se persigue garantizar el retorno seguro de los desplazados a ambos lados de la Línea Azul, la frontera delimitada por la ONU entre Líbano e Israel.
España y Líbano condenan enérgicamente los ataques indiscriminados que están teniendo lugar, especialmente aquellos dirigidos contra la Fuerza Interina de la ONU en Líbano (FINUL) y las Fuerzas Armadas Libanesas. Ambos países hacen un llamamiento al respeto del Derecho Internacional Humanitario y las Convenciones de Ginebra, subrayando la protección de civiles, personal médico, instalaciones sanitarias y periodistas. La situación humanitaria en Líbano es extremadamente preocupante, con miles de civiles afectados por los bombardeos y la destrucción de infraestructuras esenciales.
El compromiso de España y la ayuda humanitaria en Líbano
España, como miembro comprometido con la paz y la seguridad internacional, ha reiterado su firme compromiso de mantener su contingente de cerca de 700 efectivos desplegados en la FINUL. Esta fuerza de paz juega un papel vital en la estabilización de la región y la protección de la población civil. El ministro Albares ha insistido en la importancia del respeto al Derecho Internacional y al Derecho Internacional Humanitario por parte de todos los actores involucrados en el conflicto.
Además del apoyo militar a través de la FINUL, España ha mostrado su solidaridad con el pueblo libanés mediante una importante contribución a la ayuda humanitaria. Hasta la fecha, se han destinado cerca de 5,5 millones de euros en ayuda humanitaria, además del envío de aproximadamente 12 toneladas de medicinas y mantas para la población más vulnerable. Este apoyo es fundamental para paliar las graves consecuencias de la crisis y proporcionar asistencia a quienes más lo necesitan.