La convivencia en una comunidad de vecinos implica una serie de responsabilidades económicas. Además de las cuotas mensuales destinadas al mantenimiento de las zonas comunes, como limpieza o reparaciones menores, existen situaciones imprevistas que requieren de aportes extraordinarios, conocidas como derramas. Este término se refiere a un pago adicional que deben realizar los propietarios para cubrir gastos no contemplados en el presupuesto habitual. Entender qué son las derramas, cuándo son obligatorias y cómo se calculan, es clave para una correcta convivencia vecinal y evitar conflictos. A continuación te contaremos en que casos estás obligado a pagar las derramas. ¡No te lo pierdas!
4¿Qué sucede con los excedentes de las derramas?
En ocasiones, tras realizar las obras o reparaciones para las que se ha recaudado una derrama, puede quedar un excedente de dinero. En estos casos, la ley no establece una normativa específica sobre cómo proceder, por lo que son los propios propietarios los que deben llegar a un acuerdo sobre el destino de esos fondos.
Lo más común es que el excedente se destine a los fondos de la comunidad para futuras necesidades, como un colchón económico que pueda utilizarse en caso de una nueva emergencia. Sin embargo, en algunas comunidades, los propietarios prefieren que se les devuelva su parte proporcional del sobrante. Todo dependerá de las normas internas de la comunidad y de lo que acuerden en la junta de propietarios.
Es importante que este tema se aborde de manera clara y transparente, ya que la falta de comunicación sobre el destino de los fondos puede generar desconfianza entre los vecinos y derivar en conflictos innecesarios.
