Pitidos, contenedores quemados y cargas policiales tras el último partido del Valencia CF en Mestalla
No corren buenos tiempos para el Valencia CF. El equipo dirigido por Rubén Baraja es el colista de LaLiga tras su derrota en Mestalla frente a la UD Las Palmas que llegaba al encuentro como farolillo rojo. Además, a la crisis deportiva se le suma una guerra pública entre la afición y la directiva encabezada por Peter Lim desde Singapur.
Como consecuencia, y siendo la derrota contra el equipo canario el detonante, anoche se vivieron momentos de mucha tensión al término del partido. Algunos de los pocos aficionados que aguantaron en Mestalla hasta el minuto 90 decidieron congregarse por donde debería salir la directiva che para recriminarse una vez más por su desastrosa gestión. Finalmente, los cuerpos de seguridad del Estados tuvieron que intervenir y la situación acabó con cargas policiales y contenedores ardiendo iluminando la noche valenciana al más puro estilo fallas.
La situación de Baraja apunta a despido
La derrota del Valencia CF frente a la UD Las Palmas ha sido quizás la más dura a nivel anímico. Y es que, con una victoria los de Baraja hubieran puesto tierra de por medio con el último clasificado. Por el contrario, dejarse esos tres puntos en casa les ha supuesto pasar a ocupar la posición de farolillo rojo, un hecho colocado a Rubén Baraja en una difícil situación.
Así, pese a que el técnico vallisoletano mostró su optimismo en la rueda de prensa posterior al partido, donde aseguró que el Valencia CF es capaz de dar la vuelta a la situación, lo cierto es que su despido está más cerca de lo que parece. Y mucho más teniendo en cuenta que le renovaron la pasada temporada con una mejora sustancial de las condiciones tras casi llevar al equipo a Europa.
Al Valencia CF solo lo pueden salvar los jugadores
Se puede señalar a Peter Lim, que con sus negocios ha destruido todos los proyectos deportivos del Valencia CF. También podemos señalar a Rubén Baraja, que esta temporada no está sabiendo sacar rendimiento a sus jugadores, pero lo único cierto a día de hoy es que si el conjunto valencianista se quiere salvar va a depender única y exclusivamente de sus futbolistas.
Desde la grada parece que tienen claro este objetivo y, por ello, la salida de los jugadores de Mestalla en el día de ayer fue tranquila y sin incidentes a pesar de la derrota. Y es que, los aficionados del Valencia CF ya han demostrado en otras ocasiones que irán con el equipo hasta el final.